«Nuestro jugador Gareth Bale, que sintió unas molestias en su pierna izquierda al término del entrenamiento del pasado jueves, ha sido sometido este viernes a diferentes pruebas por Sanitas, los servicios médicos del club. Se le ha diagnosticado una rotura fibrilar en el tercio medio del músculo aductor largo de la mencionada pierna», indica el Real Madrid en un comunicado.
El galés daba los últimos pasos hacia su recuperación de la lesión que sufrió, un edema sin rotura fibrilar en el sóleo de la pierna izquierda, pero se le ha hecho un poco cuesta arriba, volviéndose a lesionar en la misma pierna esta semana, motivo por el cual no participó en el entrenamiento del pasado viernes sobre el césped de Valdebebas.
Lleva desde el 26 de septiembre alejado de los terrenos de juego, cuando cayó contra el Borussia Dortmund y aunque queda pendiente de evaluación, todo indica que será como mínimo un mes lo que el galés permanecerá fuera del campo de juego.
La preocupación del conjunto blanco hacia el estado de salud de su centrocampista se palpa en el ambiente, y así lo demostraba Isco ante la prensa: »A Bale mandarle un abrazo. Seguro que lo está pasando muy mal. Gareth lleva mucho tiempo lesionado. ¿Si me ha ayudado su lesión? Yo he trabajado mucho cuando sabía no iba a tener minutos y al final el fútbol, es esto, minutos que te pueden cambiar la vida. Es fútbol. He intentado estar preparado para cuando me tocase y ayudar al equipo».