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Continúa el ascenso de Jorge Romero

Jorge Romero durante un encuentro del Córdoba B | Fuente: Jose Luis Pedraza (Sexto Anillo)

Tiene solo 31 años pero Jorge Romero está consiguiendo ser una apuesta segura hasta el momento. Desde su llegada al banquillo del Córdoba B para sustituir a Carlos Losada, el cordobés ha conseguido distintos logros que le han permitido a la directiva asignar un rápido sustituto de Merino, de forma «interina», hasta encontrar un supuesto sustituto.

Romero sabe lo que es salvar los muebles

Ya la campaña pasada demostró tener las ideas muy claras sobre el césped. El filial cordobesista iba en decadencia tras pasar dos entrenadores por su banquillo, pero el aire fresco que trajo consigo fue suficiente para aclarar las ideas de sus jugadores.

Con un juego de paciencia, posesión y efectividad, el Córdoba B supo salvar la categoría de una forma muy rápida. En once partidos, los jugadores de Jorge Romero ganaron seis encuentros, empataron tres y perdieron solamente dos. dejando un parcial de 17 goles a favor y 10 en contra.

El Córdoba CF necesita alguien con control en el banquillo

Por el momento, Jorge Romero solo va a estar de forma provisional en el banquillo, pero no sería de extrañar que si mejora el equipo a la espera del nuevo entrenador, la directiva decida mantenerlo ahí. Si esto llegase a ocurrir, el técnico blanquiverde podría tener ese algo que necesita la plantilla del primer equipo.

El técnico blanquiverde durante el encuentro frente al Betis Deportivo | Imagen: Jose Luis Pedraza (Sexto Anillo)

Algo que ha demostrado desde un primer momento es la complicidad que tiene con todos sus jugadores. Ya sea por juventud o su buen hacer, Romero tiene una gran conexión con todo el Córdoba B. Esto puede ser fundamental para el primer equipo, algo que mucha gente denunciaba que faltaba entre Merino y sus jugadores, ya que gracias a esa complicidad puede llegar la seguridad en si mismo de cada jugador, aumentando el nivel de juego del equipo en su conjunto.

En definitiva, habrá que ver qué ocurre en las próximas semanas con Jorge Romero al frente del equipo mientras la directiva decide invertir o no en un nuevo entrenador. Lo que si es verdad es que, quien sea el entrenador, debe hacer reaccionar ya al equipo o sino la catástrofe que todo el mundo empieza a aceptar ya será real.

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