Europa es otro mundo

Sonaba el himno de la máxima competición en el Bernabéu. El Real Madrid no se jugaba nada, pero olía a partidazo. El conjunto alemán se jugaba su presencia en la UEFA Europa League y miraba de reojo el partido que se disputaba en Inglaterra. A pesar de la derrota, no hubo disgusto alguno, ya que el Apoel también cayó.

Comenzó dominando el equipo de Zidane. Un tiro desde la frontal de Cristiano en el minuto dos fue el primer aviso. Se le avecinaba al Borussia Dortmund un partido difícil. Corría el minuto siete cuando una internada hacia dentro de Cristiano, con pase y fallo de Isco en el control, acababa en gol de Mayoral. Picadita por encima del portero y el primero del partido. No tuvo su mejor partido el canterano, pero, siempre que juega, mete gol. Toma nota Zidane.

Un Kovacic activo comandaba y hacía sufrir a los alemanes. En el minuto 12 se adentraba Nacho por el lateral (imperial todo el partido) y ponía un centro al segundo palo que bajaba el croata , este la dejó atrás para Cristiano, que desde la frontal del área colocaba el balón en la escuadra izquierda del portero, Golazo y a olvidar los números en liga. Además, se convirtió en el primer jugador en anotar en las seis jornadas de la fase de grupos. ¿Cómo se puede dudar de él?

Tras unos minutos de presión alta y buenas llegadas por parte de los merengues, el Dortmund consiguió darle la vuelta a la situación. Comenzó a crear peligro en los últimos minutos de la primera parte. Ocasión clara de Aubameyang que desperdicia en el minuto 34. Aun así, el premio llegó al borde del descanso. Falta de entendimiento entre Lucas Vázquez y Asensio, que había entrado por una lesión de Varane en el minuto 37,  y balón perdido que fue suficiente para que Aubameyang rematará de cabeza un centro de Schmelzer.

La segunda parte se desarrolló de forma inversa. El equipo de Peter Bosz salió mordiendo. Tres minutos habían pasado cuando otra vez el gabonés ponía en problemas al Real Madrid. Gol de vaselina y doblete. El mejor junto a Pulisic por parte de los alemanes.

Se produjeron unos minutos de incertidumbre, de ida y vuelta, que no sabían concretar ninguno de los dos equipos. Con la entrada de Ceballos en el minuto 57 el Madrid mejoró. Pasó a dominar el juego. Los últimos 25 minutos se convirtieron en un asedio hacia la portería alemana. Ocasiones de Cristiano y Mayoral. Theo y Asensio, que fue a más, poniendo centros continuamente. A pesar de ello, las contras del Borussia seguían siendo un peligro.

Ya en los últimos 10 minutos de partido, con el Madrid volcado, llegó el gol de la victoria. Lucas remataba con el exterior del pie un balón que caía del cielo. El esférico entró pegadito al palo. Tiro ortodoxo, eficacia extrema.

Supo manejar el Madrid los minutos restantes. Respira Zidane. Las rotaciones funcionaron, aquellas que tantas alegrías han dado. Partido sin trascendencia en la clasificación pero muy importante en lo moral. Sonríe Cristiano, sonríen los suplentes, sonríe la afición, sonríe el Real Madrid en su competición.