Se les olvidó marcar
Punto de oro para el Levante para coger moral y punto insuficiente para el Sevilla que sigue en caída libre.
En un partido de máxima de necesidad en el que ambos equipos llegaban en malas rachas, sólo el Levante sale reforzado porque consigue sacar un punto en un campo en el que es muy difícil puntuar (más de un año lleva el Sevilla sin perder en casa). El Sevilla por contra, sale mucho más tocado y con una imagen de equipo perdido que no sabe a qué juega, el problema del gol cada vez es más palpable y la fragilidad defensiva sigue creciendo.
Sin duda la noticia más importante de la previa del partido ha sido la reaparación de Eduardo «el Toto» Berizzo a los banquillos, en la día de hoy ya se incorporaba a su cuerpo técnico para dar la charla de día de partido y retomar el mando del que nunca ha estado del todo desligado.
Esto fue un extra de motivación para la plantilla sevillista que empezó el partido con más intensidad que los anteriores. Salió el Sevilla con la intención de dominar el balón y encerrar atrás al Levante, y durante los primeros minutos lo consiguió, solo le faltó lo de siempre, profundidad en sus jugadas para crear peligro.
La primera parte cambió radicalmente con la primera llegada de los visitantes, una contra por el lado izquierdo acababa con el balón en el corazón del área para el turco Unal que no metió el primero de la noche porque Sergio Rico sacó una mano increíble. A raiz de esta oportunidad clarísima el partido ya no iba a ser de dominio local y el Levante se iba a dar cuenta que podía hacer muchísimo daño en sus salidas en ataque.
Se quedaba sin dueño el balón y ahora el partido se convertía en un intercambio de golpes y de ocasiones para ambos equipos. Primero las tuvo el conjunto levantino en una contra de Morales que en último momento pudo salvar Escudero del mano a mano, y posteriormente en una falta de Jason, que en un golpeo tremendo estrelló la pelota en la madera. Por su parte, el Sevilla tuvo también sus opciones en un tiro de Sarabia al borde del área de mandó a corner Oier, tambíén la tuvo Ganso en un cabezazo algo débil que pudo despejar de nuevo el portero visitante, y sobre todo, en un cabezazo de Mercado al palo a la salida de un saque de esquina. Nos marchábamos al descanso con un sorprendente 0-0 después de ver tanta oportunidad de gol clara.
En la segunda parte y sin ningún cambio, el guión iba a cambiar un poco y ahora el Sevilla iba a intentar dominar más pero tampoco sin cerrar el grifo de ocasiones del equipo visitante, ya que el Levante cada vez que se acercaba al área creaba peligro, dejando al descubierto una vez más el principal problema del Sevilla esta temporada, la fragilidad de su sistema defensivo.
En esta segunda parte y por oleadas el Sevilla tenía minutos de encerrar atrás al Levante y generar varias ocasiones. En una de esas oleadas la tuvo Ben Yedder clarísima en un precioso pase interior de Sarabia, pero Oier detuvo el disparo con la cabeza. A los dos minutos era Escudero quien la tenía, pero estrellaba su disparo en el lateral de la red.
Por su parte el Levante en esta parte seguía creando muchísimo peligro pero es verdad que le falatba el último pase o ser mucho más contudente, porque no acababa con disparos claros esas contras tan claras.
Se sucedían los cambios en el lado sevillista para intentar darle la victoria a esa afición tan descontenta últimamente con el equipo, entraban para ello Vázquez, Navas y Muriel en el tramo final del partido. El Levante ya salía cada vez menos y pensaba en ese punto tan valioso que podían llevarse a tierras valencianas.
En los últimos minutos la tuvo Ben Yedder de nuevo con otra gran intervención de un inspiradísimo Oier, hoy el delantero sevillista no tenía su noche, esta vez no acertaba con la zurda en un mano a mano muy claro. Empujaba el Sevilla por banda derecha con la incursión de Navas que centraba con mucho peligro pero que no encontraba rematador. En una de esas llegadas la tuvo clarísima Escudero en un rechace, pero se le quedó a su pierna mala y la echó fuera.
Al final empate sin goles en un partido en el que sale reforzado el Levante que llegaba de tres partido en liga con resultados negativos y sale muy tocado un Sevilla que cada vez su imagen sale más deteriorada en cada partido, ya ni en su casa es capaz de ganar, que es lo que le salvaba antes.
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