El 2017 un buen año para el Gernika Club
Repasamos en último año de los forales, un 2017 donde el equipo del pueblo ha asomado la cabeza entre los grandes de la Segunda división B.
A pocos días para la conclusión del 2017, vamos a hacer balance de cómo le ha ido el año futbolísticamente hablando al Gernika Club. Es el momento de recapitular y valorar los últimos 12 meses de los forales en la categoría de bronce del futbol estatal.
Un año de constante crecimiento sin perder las señas de identidad
Tras una gran primera vuelta gracias a la cual lograron finalizar el 2016 en puestos de play-off (3º clasificado con 30 puntos), los de Urbieta afrontaban la segunda parte del campeonato con los deberes prácticamente hechos para la consecución del objetivo prioritario de la permanencia.
Pero cuando mejor lo tenían, las victorias comenzaron a resistirse y hubo que apretar los dientes para finalmente lograr repetir curso en la categoría. El año comenzó con empates, hasta cinco consecutivos y alguna derrota inmerecida que provocó que los de Jabi Luaces fueran perdiendo semana tras semana puestos en la clasificación.
Como siempre en el seno de los de Urbieta imperó la cordura y sin perder sus señas de identidad siguieron trabajando con humildad a la espera de la primera victoria del año, que por fin se dio a finales de Marzo. Triunfo que sirvió para coger aire y seguir remando en pos de la consecución de la permanencia en la categoría. Fue en casa y casualmente contra el Toledo, equipo con el que iniciaron su racha triunfal que les llevó a ocupar los puestos nobles en la primera vuelta.
Antes de acabar el curso se lograron un par de victorias más ante Barakaldo y Arenas que certificaron la permanencia en el bronce un año más para los de Busturialdea. Finalmente terminaron en el puesto duodécimo con 49 puntos, 3 por encima del descenso y con 2 más que el San Sebastián de los Reyes equipo que disputó el play-out y con los deberes hechos se fueron a disfrutar de las merecidas vacaciones.
Tras el descanso veraniego, los forales volvieron al tajo, con las ilusiones renovadas y algunos cambios significativos en el club a nivel estructural pero sin perder su ADN de cantera, humildad, compromiso y solidaridad que caracterizan al ya comúnmente conocido como “equipo del pueblo”.
Koldo Zabala sustituyó en la presidencia del club al mítico Ángel Artola (28 años en el club, 25 como máximo mandatario). En lo que sería la tercera campaña consecutiva de los gerniqueses en la Segunda B.
Se logró la continuidad de Jabi Luaces, principal responsable de los éxitos de este modesto club, afrontando su quinta temporada con los de Urbieta. Tocaba recomponer la plantilla pero no tanto como otros clubes de la categoría puesto que hasta 13 jugadores repetirían.
La marcha de hombres importantes como Iñigo Muñoz o Ion Etxaniz no fueron fáciles de suplir, otros nombres propios como Endika Bordas o Aboubacar Diarra tampoco continuaron. Pero el trabajo tras los fogones para conseguir renovar a los Larruzea, Berasaluze, Torrealdai, Madrazo y compañía dio sus frutos y se conformó una plantilla de garantías con nueve caras nuevas entre los que destacaban Alain Barrón y Txema Pan procedentes del CD Ebro, Lander Olaetxea (Bilbao Athletic), Alex Petxarroman (Real B) o el cancerbero Diego Carrio llegado del Colunga, además de los jóvenes valores Arego, Murgoitio e Iker Bilbao traídos del Basconia que dotaban de calidad y juventud al proyecto 2017/18 de los de Gernika.
En otro sentido el club también en este 2017 ha ido dando pasos hacia la profesionalización con la incorporación de un director técnico, un preparador físico de recuperación y un jefe de prensa, siempre con la tranquilidad que da tener las arcas saneadas y el apoyo de su fiel masa social.
La primera vuelta realizada por los de Luaces debemos catalogarla como optima, mejorando en un punto la de la campaña anterior, mostrándose como un conjunto con las ideas muy claras, muy competitivo y trabajado y con unos resultados satisfactorios que hacen indicar que este es el camino a seguir.
Han terminado sextos con 31 puntos a uno de los puestos de play-off, llevan cinco partidos consecutivos sumando y en las ultimas 12 jornadas solo han caído una vez derrotados. Mucho mérito tiene lo de este Gernika que se está peleando jornada tras jornada sin ningún complejo ni excusa contra equipos con mucho mayor presupuesto e historia.
A la habitual fortaleza mostrada por el equipo como local esta temporada hay que sumarle el gran rendimiento que están ofreciendo a domicilio, convirtiéndose en el tercer mejor conjunto del grupo en este sentido, mucho mérito insisto lo de los de la Villa Foral.
El objetivo de la permanencia una vez más esta encarrilado y la segunda vuelta del campeonato servirá aprendida la lección de la pasada temporada para hacer disfrutar a su orgullosa parroquia y por qué no convertirse en la revelación del campeonato tomando el testigo del Leioa del curso pasado.
Los nombres propios
Cabe destacar a jugadores como Kevin Calle Ochoa, el lateral derecho de los forales está más que cubierto Kevin lo juega todo y bien. En la 2016/17 disputó todos los minutos de la temporada, cosa harto difícil y esta va camino de repetir hazaña si las lesiones le respetan. De momento ha hecho pleno de minutos en la primera vuelta con muy buenas actuaciones. Uno de los fijos para Luaces.
Koldo Berasaluze, Ibon Enziondo o Mikel Abaroa también son de los que prácticamente lo han jugado todo este año, convirtiéndose en las piedras angulares en las que se apoya el equipo. Por otra parte el gran rendimiento ofrecido por la dupla Olaetxea – Larruzea en la medular y el destape goleador de Alain Barrón es de lo más destacado en los últimos meses de un 2017 que ya se nos va.
En definitiva el Gernika afronta su undécima temporada en la categoría de bronce con optimismo, creciendo dia a dia sin perder sus señas de identidad y con unos números que dan tranquilidad para mirar al futuro con ilusión. Con el sueño porque no, de colarse entre los cuatro primeros y disputar por primera vez en su historia una promoción de ascenso a la categoria de plata.
El año concluye y estadísticamente hablando han sido 38 los partidos ligueros disputados en el 2017 con 11 victorias, 17 empates y 10 derrotas. 38 goles a favor y 37 en contra. El equipo sigue creciendo con unas bases solidas y el trabajo esta dando sus frutos, hasta en 17 de esos partidos han logrado mantener su portería a cero y se han mostrado competitivos en prácticamente la totalidad de los encuentros disputados a pesar de las evidentes diferencias presupuestarias y de otra índole que tienen con sus contrincantes. Es para estar contentos y orgullosos con lo logrado y esperanzados en que el 2018 será aún mejor. Aupa Gernika beti aurrera.
Sígueme en Twitter, @adolfomena72
[…] A pocos días para la conclusión del 2017, vamos a hacer balance de cómo le ha ido el año futbolísticamente hablando al Gernika Club. Es el momento de recapitular y valorar los últimos 12 meses de este lobo con piel de cordero en… […]