Se acerca fin de año y todo el mundo hace su balance personal, a nivel deportivo también se realiza ese balance, a muchos les resulta engorroso mirar las cosas que no se hicieron bien durante el año, otros se contentan con mirar ese pasado inmediato porque les fue un poco mejor, pero todos se fijan metas para mejorar o para seguir en el buen camino.
En el ámbito nacional, tanto Boca Juniors como River Plate se distinguen del resto, más que nada por su poderío económico, que hace que sus dirigentes puedan tomar otras clases de medidas para encarar los mismos problemas de todas las instituciones.
Boca Juniors terminó esta parte del torneo como único puntero, redondeando así un año en esa posición, con números que hablan a las claras el porqué de su buen andar, 12 partidos jugados, con 10 victorias, 25 goles a favor y solo cinco en contra, ahora su técnico piensa no solo en continuar de esa forma en la Super Liga, sino que se prepara para encarar su participación en la próxima edición de la Copa Libertadores de América.
Por su parte River Plate apostó casi todo a la Libertadores, pero quedó en el camino frente a Lanús en semifinales, dejando un poco descuidado el torneo local, tanto es así que quedó a 15 unidades del puntero y quizá le cueste remontar esa diferencia, teniendo en cuenta que también deberá jugar la Libertadores del 2018, lo destacable es que volvió a quedarse con la Copa Argentina, como lo hizo en la pasada edición, ganándole la final a Atlético Tucumán por 2-1.
Independiente de Avellaneda, de andar regular en el campeonato nacional, logró un título internacional, la Copa Sudamericana frente a Flamengo de Brasil, muy esperada por cierto por su hinchada, ya que no festejaban casualmente cuando ganaron este mismo trofeo en la edición del 2010, ganándose así el derecho de disputar la Libertadores del próximo año, otro hecho de alegría para los fanáticos es la continuidad de su técnico Ariel Holan, a pesar de su anuncio de renuncia de la semana anterior.
Lanús es otro de los clubes que se encuentra flojo en el torneo local, porque apostó a su mejor juego en la Libertadores de este año, y mal no le fue ya que llegó a la final que disputó con Gremio de Brasil, perdió los dos encuentros definitorios y llegó a su fin el ciclo de su técnico Jorge Almirón, de todas formas disputará la edición de la Sudamericana del 2018.
San Lorenzo y Racing consiguieron resultados diversos en la competencia local, los de Boedo siguen de cerca a Boca Juniors, están a solo tres unidades, en cambio los de Avellaneda se encuentran a 14 puntos, pero ambos más allá de pensar en la Super Liga están encarando su preparación también para lo que viene a nivel internacional, puesto que San Lorenzo con Claudio Biaggio ya instalado como técnico titular competirá en la Sudamericana y Racing en la Libertadores con la incorporación de Eduardo Coudet como técnico.
Estudiantes de La Plata y Atlético Tucumán no están bien ubicados en la tabla de posiciones en la Super Liga, pero tiene la esperanza de hacer un buen papel en la Copa Libertadores. Lo mismo les ocurre a Newell´s Old Boys, Defensa y Justicia, Colón de Santa Fe y Rosario Central que disputarán la Copa Sudamericana 2018.
El resto de las instituciones están más ocupadas y preocupadas en su lucha por no descender de categoría, ya que al tener que achicar la cantidad de clubes participantes en los torneos son cuatro los que deben bajar a la B Nacional, es por eso que se les complica el panorama y cada uno de ellos deben dar pasos seguros para su continuidad en la máxima categoría de nuestro fútbol.
Si bien el fútbol es un deporte y la suerte tiene mucho que ver, las decisiones y los momentos de los dirigentes son las que ayudarán a los clubes a salir airosos o no de estas situaciones, unos por llegar a la cima del fútbol continental, otros por ubicarse en los mejores escalones del fútbol local y los demás por no caer a la segunda categoría del ámbito nacional.
Fuente: Daniel Barone.
Escrito por @daniel_barone