Desde enero hasta junio: recta final de una temporada ilusionante
Comenzó el año con el Deportivo Alavés en la zona media de la tabla y arrancando un puntito de San Mamés en el primer derbi vasco del año.
De ser un equipo que, antes del comienzo de la temporada, estaba destinado a bajar y su entrenador estaba en las apuestas como el primero que iba a ser destituido, a convertirse en un equipo muy correoso y difícil de batir gracias a la cantidad de variantes posibles.
Hasta cinco disposiciones diferentes se pudieron atisbar en un mismo partido, por lo que ordenar un equipo que jugara en su contra era casi una quimera (4-2- 3-1, 4-5- 1, 4-4- 2, 4-1- 4-1, 5-4- 1) y todo esto, a veces, con los mismos jugadores sobre el campo.
Así, poco a poco, con trabajo y la ayuda inestimable de la grada, jugador numero 12 de verdad, fue sumando puntos en empates de trabajo y victorias inapelables como en Gijón contra un Sporting muy venido a menos. Ya en la jornada 21 y 27 puntos en el zurrón.
En la jornada 22 llegó el Barça a Mendizorroza y se vengó, vaya que si lo hizo, de la derrota sufrida en la jornada 3 en el Nou Camp. En los últimos 15 minutos de la primera parte y los 10 primeros de la segunda, le endosó 6 a los locales de la mano de Messi y compañía.
A finales de Febrero y tras dos victorias consecutivas sobre Depor y Valencia, el Alavés sumaba 33 puntos en 24 jornadas. A la postre, suficientes para mantenerse, vistos los puntos del decimoctavo al final de temporada.
Llegamos a la jornada 32 y, tras la victoria contra el Villarreal, el Glorioso sumaba ya 43 puntos, cifra que costumbra a ser suficiente para la salvación de un equipo en otras temporadas.
Termina una temporada ilusionante para la ciudad y para el propio equipo con el equipo en 9º puesto, a solo 9 puntos de competiciones europeas y un total de 55 puntos. Quien escribió el cuento, lo hizo con un final apoteósico.
La Copa del Rey alavesista 2017
La Copa del Rey para el Deportivo Alavés comenzaba en Riazor antes el Deportivo de la Coruña. Partido que comenzaba dominando claramente el conjunto babazorro, lo que para el minuto 3 le hacía ponerse por delante con el gol de Christian Santos. Justo antes del descanso Edgar Méndez ponía el 0-2 mediante un penalti. La segunda parte seguía dominada sin demasiados problemas por los vitorianos, pero 25 minutos de pájara hicieron que el equipo coruñés empatase a 2 y dejaría todo abierto para la vuelta en Vitoria.
La vuelta en Mendizorroza se preveía igualada y así fue. Pese a todo antes del descanso y al igual que en la ida Edgar Méndez ponía favorable la eliminatoria para los babazorros marcando el 1-0, pero todo se complicaría a la vuelta de los vestuarios para los gasteiztarras. Theo que ya arrastraba una amarilla desde la primera parte hizo una falta absurda que le propinó la segunda tarjeta en el minuto 47. El Alavés con 10 intentaba achicar agua como podía pero en el 62 con un gol de Arribas, el Deportivo se ponía a un gol de pasar a los cuartos de final. La última media hora fue un asedio de los gallegos, pero sin suerte. Ortolá salvó varias veces a los vitorianos y gracias a eso consiguieron el pase a Cuartos.
Cuartos
En los Cuartos de Final los albiazules se enfrentarían a un increíble Alcorcón, que se plantó en Cuartos y le dió mucha guerra a los alaveses.
La ida en Santo Domingo fue un partido de lo más aburrido, sin control del juego, sin ocasiones y sin nada de fútbol. Cuando todo apuntaba al 0-0 apareció Ibai Gómez, el jugador de Santutxu que había entrado en el minuto 88, anotó dos goles en apenas 3 minutos que dejaban la eliminatoria encarrilada para el Alavés. El primero tras recibir un pase al borde del área y recortar con su pierna derecha para terminar golpeando con la zurda el balón entraba pegadito al palo. Tras el 0-1 y apenas un minuto después había falta peligrosa al borde del área y eso con Ibai es peligro asegurado. Su golpeo entraba cerca de la escuadra para poner el 0-2 definitivo.
La vuelta en Mendizorroza fue mero trámite, con un Alavés dormido que hizo el que fue posiblemente su peor partido de toda la temporada y un Alcorcón que pese a hacer peligro y generar ocasiones no lograba materializar. Pese a que los alfareros merecieron al menos un gol que les metiese en la eliminatoria, ese gol no llegó y el partido acabó con 0-0, resultado que le valía a los albiazules para clasificarse a las semifinales.
Semifinales
El bombo de semifinales quiso que los dos “cocos” se enfrentasen entre ellos (Atlético de Madrid-Barcelona) y los dos equipos “humildes” se jugarían el pase a la final. Esos dos equipos fueron Alavés y Celta.
La ida en tierras gallegas fue un partidazo, que pese al 0-0 a cualquier espectador le hubiese gustado ver.
En Balaídos estaba cayendo el diluvio, lo que hizo que no hubiese un fútbol demasiado vistoso y eso que los celestes nos tenían acostumbrado a ello. El partido comenzaba con ocasiones para los dos pero mayor dominio vigués. En la primera parte hubo una ocasión clara para ambos equipos, pero tuvo más llegadas con peligro el Celta. La segunda parte cambió completamente, el Celta se vino arriba y encerró por momentos a los albiazules en su área. Ese dominio hizo que el capitán celeste disparase al larguero a algo más de 20 minutos para el final. El Alavés tuvo varios contraataques para dar algún susto, pero sin terminar las jugadas. Justo antes del 90 el Tucu Hernández hizo lo mismo, pero no pudieron batir a Pacheco, por lo que con el 0-0 todo se decidiría en Vitoria.
El partido de vuelta en Mendizorroza fue bien distinto. El Alavés salió mucho más valiente y a apretar al Celta arriba. Eso hizo que tuviese varias ocasiones, pero nuevamente Iago Aspas, hizo la ocasión más clara de la primera parte que evitó Pacheco con un paradón. La segunda parte siguió siendo alavesista, que llegaba con más peligro que los vigueses. En el minuto 83 y tras una peinada de Camasara, Edgar Méndez hizo desatar la locura en Mendizorroza marcando el 1-0 que daba momentaneamente el pase a la final a los de Vitoria. El Celta se volcó al ataque, sabiendo que un gol le valía para clasificarse, Camarasa tuvo la sentencia en el descuento, pero perdonó y eso hizo sufrir a los babazorros hasta el minuto 96, pero un sufrimiento que sabría a gloria cuando el colegiado señaló el final del partido. El Deportivo Alavés era finalista de Copa.
Final
Llegaba la gran final, una marea albiazul se había desplazado a Madrid para vivir la segunda final de su casi centenaria historia. Una final que iba a ser inolvidable para muchos pasase lo que pasase en el césped del ya antiguo campo del Atlético de Madrid, el Vicente Calderón.
La final como no podía ser de otro modo era dominada practicamente en su totalidad por el equipo blaugrana, pero el Alavés metía miedo con sus recuperaciones altas y llegadas rápidas por ambas bandas.
En el minuto 27, Ibao Gómez enviaba un balón al palo que después se paseaba por la línea de la portería defendida por Cillessen. El Barça continuaba dominando pero sin ocasiones claras, eso iba a cambiar cuando tocase el balón el astro argentino Leo Messi y así fue, tras una pequeña conducción hizo una pared con Neymar y su disparo desde la frontal fue ajustado al palo imposible para Pacheco 1-0 y el Alavés a remar contra corriente. Poco le duraba la alegría a los culés puesto que tan solo dos minutos después Theo se sacaba un zapatazo a la escuadra tras una falta escorada, 1-1 y la ilusión por las nubes.
Una ilusión que en el minuto 44 Neymar hizo que se disipara marcando el 2-1 en posición antirreglamentaria que no vió el linier. Pero eso no fue lo peor, ya entrados en el descuento y cuando más duele, Alcácer hacía el tercero que dejaba el partido visto para sentencia.
El Alavés lo intentó todo en la segunda parte y tuvo alguna ocasión de recortar distancias, ayudada por la desidia blaugrana que jugó andando gran parte de la segunda mitad y aún así le valió para poder marcar algún gol más. El linier anuló un gol a Deyverson por fuera de juego claro.
No hubo mucho más en esta segunda parte y el Barcelona se llevaba otra copa más a su vitrina para la total tristeza de los más de 25 mil albiazules que estuvieron en el Vicente Calderón.
Dieciseisavos 2017-2018
El subcampeón de la pasada edición de la Copa comenzaba su nueva andadura en el torneo del K.O frente a un recién ascendido como es el Getafe.
El partido de ida en el Coliseum fue malo por parte de ambos equipos, nada de juego y menos aún de ocasiones. Partido trabado, muchas faltas y sin juego fluído. Un solitario gol de Santos en la recta final del partido daba ventaja a los babazorros para el partido de vuelta.
En Mendizorroza la cosa cambió, el Alavés que venía de destituir a Gianni De Biassi se mostró mucho más valiente, pese a ir por delante en la eliminatoria fue a sentenciar la misma cuanto antes y poco tardó en hacerlo. Para el minuto 3 Munir ponía por delante a los albiazules y dejaba la eliminatoria vista para sentencia. El Getafe lo intentaba sin acierto y Bojan a la media hora de encuentro ponía el 2-0 que sentenciaba definitivamente la eliminatoria, con ese resultado se llegaba al descanso.
Tras la vuelta de vestuarios el partido se volvió más espeso, con el Getafe buscando algo más la portería pero sin inquietar a Sivera para que a poco más de 20 minutos para finalizar el encuentro Munir marcase el segundo en su cuenta y cerrase la goleada. Finalmente 3-0 en Mendizorroza para un 4-0 global que le daba el pase a los octavos de final, en los que la diosa fortuna de los bombos quiso que le tocase el Formentera.
2017-2018: Preparando la nueva temporada
El Deportivo Alavés encaraba el verano de 2017 planteando una nueva revolución a su plantilla. Mauricio Pellegrino abandonaba el club rechazando una oferta de renovación de la directiva que suscitaría innumerables debates entre la afición babazorra.
Entrenador: Pronto comenzaría a sonar para el banquillo alavesista un joven entrenador argentino, que venía avalado por un buen recorrido en las ligas sudamericanas (argentina, colombiana, ecuatoriana…). Debido a su escasa experiencia en la liga española hubo problemas con su incorporación al equipo, pero finalmente, Sergio Fernández logró su rúbrica.
Jugadores: muchas fueron las (dolorosas) bajas que el equipo albiazul fue padeciendo escalonadamente en sus filas: Theo Hernández y Marcos Llorente (Real Madrid), Kiko Femenía (Watford), Victor Camarasa y Feddal (Betis), Edgar Méndez (Cruz Azul) y Deyverson (Palmeiras)…
Una temporada más, se planteaba una renovación casi total en la plantilla. Ruben Duarte (del Espanyol) y Hector Hernández (cedido por la Real Sociedad) llegaron a cubrir el lateral izquierdo. Seguidamente se incorporaría Demirovic, una joven promesa bosnia que se planteó comenzaría la temporada con el filial babazorro.
Enzo Zidane, haciendo alarde de un apellido de campanillas, sería fichado por 3 años y, posteriormente, se incorporaría Dieguez, con ficha del filial.
La cesión por parte del Villarreal de Alfonso Pedraza, vendría acompañada por la compra del hasta entonces cedido Rubén Sobrino. Traspasados se incorporarían Burgui (Sporting de Gijón) y Guillermo Maripán, con contrato para los próximos 4 años.
Mubarak Wakaso (procedente del Panathinaikos) y Antonio Sivera (portero) serían de los últimos jugadores en incorporarse antes de la pretemporada.
Ya en agosto, se oficializa el fichaje de Rodrigo Ely, jugador que había ganado el corazón de los aficionados vitorianos la recta final de la temporada anterior. A punto de finalizar la pretemporada, Tomás Pina, mediocentro, se incorporaría a la disciplina.
Con el comienzo de la temporada y el cierre de mercado, llegarían tres incorporaciones más para la primera plantilla: Álvaro Medrán (Valencia), Munir (Barcelona) y Bojan Krkic (Stoke City) todos cedidos.
Con la plantilla ya completa, comenzaban los problemas en la Liga.
Pretemporada: resultados irregulares los obtenidos en los partidos de preparación que, quizá, hacían presagiar la marejada que poco después se daría en Liga.
Se comenzó empatando a 0 frente al Toulouse, para posteriormente conseguir vencer frente a la UD Logroñés. Frente al Mirandés se daría la única victoria consecutiva de los albiazules (3-0), para posteriormente quedar en tablas con el Numancia.
Se reencontraría con la victoria frente al Trabzonspor turco para posteriormente empatar con el Levante. La pretemporada se cerraría con una derrota frente a los pepineros del Leganés en el Trofeo Villa de Leganés.
Comienza la competición
La Liga comenzaría con un reencuentro. Deportivo Alavés y Leganés se volvían a enfrentar apenas unos días después del Torneo en el que los albiazules habían salido escaldados.
Complicado partido que se saldó con la primera derrota del curso. Manu García falló un penalti del que, posteriormente, toda la hinchada albiazul se acordaría tras el gol de Gabriel. Primer jarro de agua fría para los alaveses, que se enfrentaban a un duro calendario de partidos a partir de entonces.
El siguiente encuentro, el primero en la temporada en el templo albiazul, acogería al FC Barcelona en el césped de la capital. Los vitorianos mostraron una buena cara frente a un Barcelona no especialmente brillante que, tuvo su protagonista en el siempre omnipresente Leo Messi. Los 3 puntos se marcharon con los de la Masía.
El siguiente encuentro fue en Vigo, frente a un Celta que siempre se crece en casa. El encuentro se saldó con una nueva derrota vitoriana, tras un gol de Maxi Gomez. Aunque los albiazules intentaron competir, no hubo fortuna.
Comenzaban los murmullos ya entre el graderío alavés, con 3 derrotas consecutivas y sin goles marcados y ya comenzaban a preguntarse algunos si Sergio Fernández no se había aventurado demasiado al fichar a un entrenador excesivamente joven y con muy poca experiencia en la Liga española.
El partido contra el Villarreal sentenció a Zubeldía. Una contundente derrota por 0-3 y una lamentable imagen, la directiva del Deportivo Alavés destituía a Luis Zubeldía.
Un motivador para el banquillo
Javi Cabello cubriría el hueco dejado por el técnico argentino en una semana cargada de encuentros de Liga consecutivos. La primera parada en A Coruña se saldó con una nueva derrota albiazul, aunque con una imagen bastante mejorada.
El siguiente encuentro, ya con Gianni De Biassi anunciado como nuevo entrenador (aunque con Cabello aún en banquillo), fue contra el Real Madrid. Manu García quiso compensar el penalti fallado en Leganés dando el primer gol de la temporada para los de Vitoria. A pesar de ello, los 3 puntos volvieron a salir de Mendizorroza en las botas visitantes. Las sensaciones, en cambio, comenzaban a ser diferentes.
El italiano comenzaría su andadura con el club del Paseo de Cervantes frente al Levante. Se cumplió aquello de entrenador nuevo victoria segura tras dos goles de Munir y Medrán.
Tras un parón de selecciones, llegaba el primer derbi vasco a la capital alavesa: la Real Sociedad aterrizaba en Mendizorroza. Un partido flojo de los de casa, sin apenas ocasiones de gol, motivaron de nuevo que el casillero de puntos alavesista siguiera prácticamente vacío. Elustondo y Oyarzabal sentenciaban el partido.
Ya penúltimo en la tabla, el D. Alavés veía la necesidad urgente de comenzar a sumar puntos. Llegaba así el partido contra el Betis (en ese momento a pocos puntos de los puestos más altos de la tabla) en Sevilla, que propició otro nuevo descalabro de los albiazules por 2-0.
Otra vez la Copa y continúa la sangría en Liga
En pleno proceso de debacle babazorro, comenzaba de nuevo la competición paralela a la Liga: la Copa del Rey.
Tras ella, el Valencia C. F. llegaba a Mendizorroza y se llevaba los tres puntos tras un error clamoroso de Rodrigo Ely que provocó un absurdo penalti. Dolorosa derrota ésta, tras un partido en el que el D. Alavés mostraba otra cara ya muy diferente.
El siguiente choque, de nuevo en casa, se saldaría ya por fin con los ansiados 3 puntos para los locales. Un tempranero gol de Christian Santos daría alas a unos babazorros que ya veían más cerca el final del túnel.
Sin embargo, esto no se confirmó frente al Getafe dos semanas después. Los madrileños darían un auténtico repaso a los albiazules en el Coliseum y, ni un gol en el último minuto de Santos pudo salvar los papeles de un Alavés que volvía a mostrar su peor cara (4-1).
Así, llegaba el segundo derbi a Vitoria, con un Eibar casi pasando los mismos apuros que los albiazules. Partido que podía resultar decisivo con un enfrentamiento ante un rival tan directo. Sin embargo, una nueva derrota y otra imagen deplorable más sentenciaba el futuro del poco rodado técnico alavesista. De Biassi era destituido y Javi Cabello volvía a sentarse en el banquillo.
El asturiano que provocó la reacción
Tras el pase a octavos de final de Copa de la mano de Javi Cabello (3-0), se presentaba a Abelardo Fernández (“Pitu”) en las oficinas de Mendizorroza.
Éste, mantendría en su equipo técnico a un Javi Cabello que contaba ya con el pleno apoyo de la afición vitoriana (dando entrada al canterano Martín Aguirregabiria), con tan sólo unos pocos días antes de su estreno en Montilivi.
Cuando ya parecía que, una vez más, los alaveses saldrían de plaza ajena con las orejas gachas (2-0 al minuto 61), el nuevo técnico hizo reaccionar a su once con unos cambios que produjeron el efecto deseado. Ibai Gómez se convertiría en el absoluto protagonista de una remontada (una más) épica de los albiazules. Los tres puntos, esta vez, se montaron en el autobús de vuelta a Gasteiz.
La U. D. Las Palmas sería el siguiente en enfrentarse a los alaveses. Por primera vez en Liga, se encadenaban dos victorias consecutivas (2-0) y la afición alavesista ya veía la facilidad de asaltar el recientemente estrenado Wanda Metropolitano. Ante un invicto Athletico de Madrid, los albiazules realizan un buen juego y se muestran como un grupo más consolidado, aunque siguen faltando goles. Un solitario gol de Fernando Torres arrebataría los puntos a un equipo que ya, empezaba a ser otra cosa.
Final de año fuera de descenso
El último partido de 2017 enfrentaba al Alavés a un rival directo. Un Málaga sumido en puestos de descenso y con la misma urgencia por sumar puntos, llegaba con Michel en el banquillo (técnico muy cuestionado pero que ha conseguido resistir al frente del cuerpo técnico).
Un 1-0 de Munnir (que bien podía haber sido alguno más) traía la alegría al graderío de Mendizorroza. Esta victoria sumada a las derrotas de rivales directos, llevaba a los babazorros por primera vez en la temporada, fuera de puestos de descenso.
Un buen final de año para un club que ha vivido lo mejor y lo peor durante estas dos medias temporadas.
Los protagonistas del año
Sin lugar a dudas, no podemos acabar el año 2017 sin mencionar a los que, sin duda, son los principales garantes del club alavesista: sus aficionados. Por eso, no hemos podido evitar titular el resúmen del año con uno de los últimos tifos de @Iraultza1921, la principal peña alavesista.
La constancia en el apoyo y respaldo que desde las gradas de Mendizorroza y fuera de ellas han demostrado en numerosas ocasiones, ha llevado a calificarles de modo generalizado como “una de las mejores aficiones de la Liga” (aunque no oficialmente).
Su exhibición en la semifinal y final de la Copa del Rey fue alabada desde numerosos sectores, así como el respaldo que han mostrado en la primera mitad de la temporada 2017-2018 a pesar de la mala situación del equipo.
Sin duda, el fútbol sin hinchada, es menos fútbol.
El momento del año
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Autores: @mtzsextoanillo; @gaizkagutierrez: @Estialavesekoa