Los Timberwolves hunden a los Lakers y se acercan al podio del Oeste

Esta victoria es la séptima en ocho partidos para los dirigidos por Thibodeau, que mejoran su récord a 24-14, 4° en el Oeste y pisándole los talones a San Antonio Spurs. Los Lakers, por el contrario, suman 7 derrotas en fila y se hunden en el fondo de la conferencia, con récord de 11-25.

NOTA: los resultados parciales se expresan siempre en función de visitante-local, siguiendo el sistema estadounidense. Las estadísticas están extraídas de BasketballReference y NBA.com.

La noche del lunes,  la primera jornada de la NBA en 2018, encontraba a ambos equipos recién llegados a la fría Minneapolis tras jugar el domingo. Los Wolves habían derrotado con claridad a los Pacers, mientras que los Lakers habían sufrido una descorazonadora y desgastante derrota en cancha de los Rockets y en doble tiempo extra, 142-148.

Quizás ese extenuante cotejo les pasó la factura, porque el primer cuarto Minnesota sacó la ventaja que luego se dedicó a mantener. Taj Gibson inauguró el marcador con dos libres en la marca de los 11:13. Los Lakers parecían totalmente desorientados en ataque y cometiendo pérdidas tontas (terminaron con 24 pérdidas, que le costaron 29 puntos), y una corrida en solitario de Wiggins (que asistió a Butler en un bonito alley-oop) obligó a Luke Walton a pedir tiempo muerto.

Apenas regresaron al parqué ambos equipos, Wiggins puso el marcador 0-12 con 9:25 por jugar gracias a una jugada de tres puntos a la antigua. Faltando 8:24, Walton cambió a los cinco jugadores, y recién Clarkson rompió la sequía con un triple y poniendo el marcador 3-16. A partir de allí los visitantes tuvieron un parcial de 15-14 para que el cuarto termine 18-30.

El segundo cuarto comenzó con un doble en la pintura de Karl-Anthony Towns, que terminó el partido con 16 puntos y 13 rebotes. Para los Lakers abrió el cuarto Julius Randle, que terminó con un doble-doble de 15 puntos y 12 rebotes, y cuyo nombre suena en varios posibles traspasos de la franquicia angelina.

Ninguno de los equipos contó con sus bases titulares, Jeff Teague y Lonzo Ball, fuera por lesión. El cuarto finalizó igualado 30-30, pero tras el pésimo arranque Lakers necesitaba una larga racha ofensiva complementada con paradas defensivas, y eso nunca ocurrió durante el transcurso del encuentro. Tuvieron, por ejemplo, un parcial 12-2 que los acercó a nueve puntos, pero los Wolves jugaron mejor y con margen de error.

La primera mitad finalizó 48-60 en favor de Minnesota, que tiró mucho mejor de campo (48% a 39%) y dominó la zona (28 puntos en la pintura contra 14). La segunda mitad se inauguró con un triple del novato Kyle Kuzma, que todavía no había anotado, y tras otro triple los Lakers se pusieron a 6 puntos.

El marcador se mantuvo parejo e Ingram volvió a ponerlo a 6 con un bonito disparo con 5:05 por jugar, 70-78, pero los Wolves, con una anotación variada, consiguieron un parcial de 4-13 para volver a sacar ventajas. Nance Jr. anotó una bandeja con 25,3 segundos por jugar y el partido se fue al último cuarto 76-91.

Los últimos doce minutos comenzaron con una anotación en el poste de Butler y una ventaja de 17 para los locales, que se amplió a 19 con más de 10 minutos por jugar (y, desde la conversión de Ingram 7 minutos atrás, parcial de 6-17) y nunca más fue de menos de dos dígitos.

Los Wolves buscarán estirar su presente favorable cuando visiten el jueves Nets, mientras que los Lakers buscaran cortar su racha negativa (también el jueves) cuando reciba a Oklahoma City Thunder.

Crónica realizada por: @CarlosLabateNBA