¿Puede ganar Curry su tercer MVP?
Los estratosféricos números que está realizando el base de Golden State tras la vuelta de su lesión hacen que más de uno se plantee la posibilidad de que vuelva a alzarse como el mejor jugador de la NBA
El pasado 6 de diciembre, Stephen Curry sufrió un esguince de tobillo que lo dejó apartado de las canchas durante tres semanas. Kevin Durant fue el encargado de liderar al equipo debido a la ausencia del base. El alero se situó como uno de los principales favoritos para llevarse el MVP promediando 25 pts. y 50% en tiros de campo. Por su parte, Curry estaba realizando una buena temporada pero no era suficiente para optar al galardón.
Sin embargo, cuando le tocó volver a jugar lo hizo de la mejor manera. Los Memphis de Marc Gasol no fueron capaces de detener al base de Golden, que estaba tan enchufado como siempre. Don Stephen necesitó únicamente 26 minutos para anotar 38 puntos (10 tripes) con un porcentaje del 77% de acierto. Curry quiso hacerse notar y avisar a todo el mundo de que el descanso le ha venido muy bien.
Esto fue sólo el comienzo de un camino ascendente en sus números y en su juego. En los últimos cinco partidos ha conseguido mantener unas estadísticas espectaculares; promedia 35 puntos (53,2% Triples) y 5,6 asistencias jugando una media de 32 minutos por partido. Es decir, está anotando a un ritmo de 1,1 punto por minuto. Todo gracias a su ridículo porcentaje de 79,2% de acierto.
La inmejorable racha le ha hecho escalar puestos hasta ocupar la quinta posición en el ranking de la NBA por el MVP. Y es que si todo lo comentado anteriormente no es suficiente motivo para creer en sus posibilidades sólo basta con echar un vistazo a lo que hizo hace dos días. Curry se desató ante los Clippers alcanzando 45 puntos en tres cuartos. Estas fueron sus declaraciones al finalizar el choque: «Lo supe enseguida cuando conseguí la libertad en un par de triples en el primer cuarto. Cuando entraron, comencé a tener ritmo. Pero más allá de eso, mantienes la cabeza baja y sigues lanzando, sigues agresivo y eso es todo«.
No cabe duda alguna de que le ha abierto las puertas a la bestia que lleva dentro y que nunca se fue. Está completamente imparable y aún le quedan muchos partidos para seguir brindando espectáculo.