Los Clippers se imponen a unos flojos Celtics en el Garden

Los Ángeles Clippers han vencido a los Boston Celtics  (129-119) en el partido disputado esta madrugada en el TD Garden. Por parte local, Kyrie Irving fue el máximo anotador (33 puntos) aunque no pudo evitar que los angelinos se llevasen la victoria, liderados por la brutal actuación de DeAndre Jordan, con  30 puntos y 13 rebotes.

El cuadro visitante afrontaba la visita al Garden con la confianza que otorgan los cuatro triunfos cosechados en los cinco encuentros disputados en febrero. Y es que el cuadro de Doc Rivers ha digerido el sonado traspasso de Blake Griffin de manera magnífica y parece haber recuperado la ilusión, acercándose de nuevo a los puestos de Playoff.

La franquicia de Bean Town, por su parte, llegaba al partido con las fuerzas muy justas y con la moral minada después del duro castigo recibido por los renovados Cavs en el último choque. Los de Brad Stevens han tenido que resignarse a perder el primer puesto del Este, ante la pujanza de los Raptors, y parecen haber exprimido buena parte de su potencial en el magnífico arranque del año. Los de Massachussetts serán uno de los conjuntos que más agradezcan el descanso de nueve días  para volver a la competición con fuerzas renovadas.

El encuentro comenzó con los Clippers muy enchufados, endosando un parcial de 8-2 de salida a los de Boston. Desde ese momento, el cuadro local iría siempre a remolque de los californianos, liderados por unos excelentes Tobias Harris y DeAndre Jordan. La buena actuación de Kyrie Irving apenas conseguía limitar la ventaja foránea, llegando al final del primer acto con un claro 34-25 en el luminoso.

El segundo asalto tampoco auguraba un cambio de tendencia, obligando a Brad Stevens a solicitar un tempranero tiempo muerto. Tras las instrucciones del entrenador de Indiana, los Celtics reaccionaron de la mano de un sobrio Al Horford, igualando el tanteador (45-41). En ese momento apareció un inspirado Danilo Galinari, devolviendo la iniciativa a los angelinos. No obstante, un nuevo arreón local, con especial protagonismo de Irving y Rozier, ajustó de nuevo el tanteador antes del descanso.

Tras el paso por los vestuarios, los Celtics cobraban nuevos bríos, consiguiendo ponerse por delante en el electrónico en varias ocasiones. El liderazgo de Irving hacía que la parroquia del Garden creyera en la victoria, a pesar de que el ímpetu de DeAndre Jordan imponía su ley en la zona sin apenas oposición. De este modo la ventaja de los Clippers era mínima para encarar el cuarto decisivo y la sombra de una nueva remontada verde recorría el eléctrico ambiente del pabellón local

Boston se queda sin gasolina

El inicio del último envite reafirmaba las buenass sensaciones de los de Bean Town al final del tercer periodo, alcanzando un esperanzador 95-99 en el marcador. No obstante, tras un tiempo muerto solicitado por Doc Rivers, los visitantes endosaron un duro parcial de 10-0 a los Celtics, amenazando con aguar la fiesta de los de Massachussetts. Mientras Brad Stevens se esforzaba en tratar de corregir una defensa que hacía aguas por momentos, un sobrado Lou Williams desilachaba el otrora infalible sistema de ayudas de los locales, alcanzando una holgada ventaja (126-113) que resultó demoledora para el cuadro local. El último acto supuso la confirmación del mal encuentro de los locales en defensa (mayor anotación encajada en toda la temporada), proporcionando un final de encuentro plácido para los de Los Ángeles.

Con este triunfo los Clippers mantienen su buena línea de juego y resultados, demostrando el acierto en el traspaso de Blake Griffin y acercando a los angelinos a los puestos de privilegio de la Conferencia Este. Los Celtics, por su parte, llegan al parón del All Star en el peor momento de la temporada, aunque los días de descanso puede que sean la mejor noticia para un conjunto que parece haber llegado extenuado al ecuador de la temporada.