Fernando Alonso competirá en Le Mans los dos próximos años con Toyota. El piloto asturiano declara sus intenciones en una entrevista con el diario MARCA.
El coche. «Está muy bien, es un coche diferente a la hora de pilotarlo, pero con características distintas e intentas adaptarte a él y sacarle el máximo partido. Toyota tiene toda la experiencia de estos años atrás, y un grupo de pilotos muy experimentados en el WEC, así que la adaptación es mucho más fácil con toda esta estructura detrás».
La tracción y la libertad electrónica es lo que varía respecto a la F1
Un reto. «Pues sí es un reto, y en efecto es un reto valiente, no por estar en Toyota, es estar en una carrera mítica, con el mejor equipo, seguro, que va a participar en Le Mans, que me da más seguridad y es un reto valiente porque hay mucho que ganar y mucho que perder, pero cuando hay algo que ganar, merece la pena. El objetivo es ser campeón del mundo de la especialidad, y tengo muchas ganas de Le Mans, lo he visto mucho por la tele y tengo curiosidad por estar a los mandos, las grandes rectas, la velocidad, la poca luz al conducir de noche porque aunque estoy acostumbrado a Singapur, etc., pero aquí está menos iluminado».
Qué cambia respecto a Daytona. «Sí, bueno igual no es igual porque el nivel de pilotos en el WEC es más alto, porque en Daytona había algún amateur, y luego la gestión del tráfico depende de las diferencias de velocidad con el coche. Ahora cuando lleguemos a un GT con el Toyota será distinto que con el LMP2 que llevaba en Daytona, habrá que anticiparlo y tomar decisiones rápido dónde lo adelantas en qué curva, jugar con eso, pero también es lo más divertido y donde el piloto tiene más que decir. Correr todos podemos correr en 1.28 pero luego a la hora de gestionar el tráfico es donde se encienden más los sentidos y tomas más decisiones. Ojalá pueda sacar más partido yo».