River empató con Chacarita y sigue sin poder ganar
Por la fecha 18 de la Superliga Argentina de Fútbol, River no se repuso de su mal momento e igualó ante Chacarita Juniors por 1-1. El gol del Millonario lo hizo Ignacio Scocco, mientras que Nahuel Menéndez igualó para el Funebrero.
El encuentro comenzó desde el primer minuto con polémica. Al minuto y medio de juego, Ignacio Fernández habilitó a su tocayo, Ignacio Scocco, y al querer eludir a Pedro Fernández, este lo tocó y lo derribó dentro del área sin que el árbitro pite la falta.
El partido era poco interesante con River siendo claro dominador del juego, pero sin ser profundo o tener ideas de tres cuartos de cancha en adelante. Chacarita, en cambio, no podía sostener el balón y buscaba encontrar el punto débil de su rival en el contragolpe.
A los 17 minutos, Marcelo Saracchi envió el centro para un solitario Lucas Pratto, que en dos toques definió y puso el 1-0, pero el juez de línea, Hernán Maidana, cobró una clarísima posición adelantada que provocó el enojo de todos los hinchas que aportaron el color y el apoyo para el Millonario en este difícil momento por el que transita.
Unos minutos más tarde, Nicolás De La Cruz se proyectó por la derecha, se frenó y asistió al Oso Pratto, pero este, al contrario de la jugada anterior, no pudo pegarle de manera cómoda al balón, ya que le quedó atrás.
La Banda estaba a punto de anotar el primer tanto del partido, y casi lo hace por medio de De La Cruz quien se conectó nuevamente con Pratto, pero el cabezazo del N°27 se fue besando el palo derecho de Fernández.
El uruguayo parecía el más desequilibrante del partido, y a los 42 minutos se fue mano a mano con el golero rival. Sin embargo, Hernán Petrik le sujetó los brazos dos veces y el juez, Hernán Mastrángelo, esta vez sí cobró el penal. Scocco posteriormente lo cambió por gol, con suspenso, porque Fernández llegó a tocar el balón, pero no logró desviarlo.
Pese a esta alegría del elenco de Marcelo Gallardo, con pases entre líneas, Nahuel Menéndez, a pura potencia, quedó mano a mano con Franco Armani y con una mala, pero eficiente, definición logró estampar el 1-1 en la última jugada del primer tiempo.
El segundo tiempo comenzó más pesado, con la visita atacando un poco más y tomando más la iniciativa. Con sólo cinco minutos, Miguel Mellado se la dio a Petrik quien llegó a la línea final, tiró el centro y, por un mínimo desvío en un defensor, Matías Rodríguez no le pudo pegar bien e increíblemente se perdió el gol a un metro del arco y sin arquero.
Además de esa jugada, fue poco lo trascendente. A los 23 minutos recién hubo una clara: cuando Nacho Fernández recibió un pase de Juan Quintero, disparó y el arquero se quedó con la pelota en dos tiempos. En la siguiente jugada, estos dos jugadores se volvieron a juntar, pero el remate de Nacho pegó en el travesaño, poniendo en evidencia la mala fortuna que maneja el Millo.
Era todo de los dueños de casa, que no podían anotar: primero con un remate de Bruno Zuculini y luego, por los reflejos del portero rival, que salió a achicar a Rafael Santos Borré que recibió un buen pase de Quintero.
Para finalizar el partido, Camilo Mayada recibió un córner corto y rápido y sacó un fortísimo tiro con su pie derecho que dio en la parte exterior del palo izquierdo del arco y se fue, sepultando las esperanzas de su equipo por quedarse con los tres puntos.
Escrito por @CHBSports