Lo que mal empieza mal acaba. Y esta temporada quedará marcada en los anales de la historia malaguista como una de las peores y más vergonzosas para todos esos miles de aficionados que realmente sufren, lloran y pelean por la camiseta blanquiazul y ven impotentes como su equipo se marcha a segunda división.
A segunda se va el club al completo por méritos propios, porque ha fallado todo desde la pretemporada. Empezando por el presidente que no ha dado la cara, Arnau, Michel, Husillos, José González y la plantilla. Una plantilla que se ha confeccionado sin calidad, ni pundonor. Un equipo que no demuestra el amor por la camiseta que defienden, y sólo piensan en que llegue el mes de Mayo para huir de Málaga con «los bolsillos llenos» de un dinero que no han sabido ganarse.
Los únicos que han vuelto a dar la talla, año tras año, ha sido la afición que nunca abandonó al club de sus amores, pero que ya están cansados de tantas milongas y «matemáticas». Ya no vale poner paños calientes, el equipo no reacciona, no compite y se verá abocado a competir en segunda la próxima temporada y son muchas las voces que reclaman una actuación acorde a las circunstancias reales del equipo, y aprovechar la desgracia de estar ya en segunda para ir preparando la plantilla para la próxima temporada.
Esta temporada se encuentra totalmente perdida, y aunque el míster dijera en rueda de prensa «Yo no puedo dar más», no parece solución cambiar de entrenador pensando en lo que queda de temporada.
La mayoría del aficionado piensa que no deberían jugar, ni un minuto más, todos aquellos jugadores cedidos o que no vayan a seguir la próxima temporada en segunda, ya está bien el arrastrar el escudo por todos los campos de España y entrar en todos los libros de récord, como el que más expulsados lleva (doblando al siguiente equipo), el que menos goles lleva (16) e ir subiendo a jugadores del filial, que serán los que finalmente competirán el año que viene y sienten realmente los colores. Lo suyo sería además ir buscando al entrenador que dirija al equipo en segunda para que vaya creándose una plantilla con poder y fundamento de hacer grandes cosas en una Liga 1,2,3 muy competitiva y donde es muy difícil ascender.
A su favor hay que muchos jugadores estén cedidos y compitiendo actualmente en segunda, lo que les irá dando mucha experiencia para una categoría muy distinta de la actual.
No vale seguir jugando con los sentimientos de una ciudad y una afición, ya no hay solución para esta temporada, pues hablemos claro y que se tomen decisiones contundentes para subsanar el desastre de este año y que no vuelva a suceder la penosa situación que se está viviendo en el Málaga CF.
Si toca jugar en segunda, allí estará la verdadera afición apoyando a su equipo, pero con una organización y una plantilla que realmente sienta los colores y sude la camiseta que tanto significa para miles y miles de malaguistas.
Por: @sergiogl65