Un huracán llamado Cristiano Ronaldo

El verde del Santiago Bernabéu se preparaba para recibir al equipo revelación de esta temporada en LaLiga Santander, el Girona FC. El partido comenzó eléctrico, con un Real Madrid sabedor de la peligrosidad de los catalanes que se volcó al ataque desde el pitido inicial.

Antes de cumplirse el minuto 10, el guardameta Bono tuvo que aplicarse dos veces para evitar el primer gol del Madrid, que pudo adelantarse con las rematadas de Cristiano y Lucas. Keylor también tuvo que desviar un disparo de Borja García, y en la jugada siguiente llegó el primer acto de la gran función que Cristiano Ronaldo interpretó sobre el tapete del Bernabéu. Un gran pase de Toni Kross en la salida de un córner habilitó al bicho, que al primer toque fusiló a Bono. Lejos de hundirse, el Girona siguió su hoja de ruta y se fue con todo a por el empate, haciendo del partido un duelo precioso con ocasiones para ambos. El Madrid consiguió hacer llegar las ocasiones al fondo de la red, pero el gol de Lucas Vázquez fue anulado por fuera de juego en una decisión polémica del asistente de Gil Manzano.

Justo antes de llegar a la media hora de partido, el killer uruguayo Stuani anotó el empate con un cabezazo descomunal que remató la falta lateral efectuada por Granell. Era el minuto 29, pero el Girona no se acontentaba con el empate y acosó al real Madrid hasta el final de la primera mitad de encuentro. Tras varias ocasiones sin acierto, gerundenses y madrileños se marcharon al túnel de vestuarios prometiendo una segunda parte vibrante.

Por supuesto, no decepcionaron. Cristiano tardó solo 3 minutos en volver a adelantar a los blancos. Una gran jugada colectiva concluyó con una fenomenal asistencia de Benzema que Ronaldo mandó a guardar. 2-1, el vendaval del Real Madrid no había hecho nada más que empezar. Con los locales decididos a liquidar el partido, los veinte minutos siguientes se convirtieron en un infierno para el Girona, que no tenía otra opción que sacar agua como podía. En el 59, una buena jugada entre Marcelo y Benzema llegó a las botas de Cristiano, que dentro del área pequeña le cedió el balón a Lucas para que lo rematara al fondo de la red. 5 minutos después el propio CR7 completó su hat-trick a puerta vacía, aprovechando una intervención de Bono después de un disparo de Benzema a bocajarro.

El partido parecía sentenciado, pero el ADN del Girona no le permite abdicar jamás. Buscando una remontada imposible, el conjunto catalán se lanzó de nuevo al ataque y se encontró con un gol que convirtió sus sueños en esperanzas reales. Stuani y su prodigiosa cabeza le ganaron el salto a Carvajal y pusieron el 4-2 en el marcador del coliseo blanco. Tocando con la yema de los dedos el tercer gol en distintas ocasiones, el Girona no pudo materializar sus ocasiones. El Madrid, por su parte, no perdonó cuando tuvo la ocasión de cerrar (de nuevo) el partido. Una carrera de Gareth Bale, que había ingresado en el terreno de juego en el minuto 71, acabó con las esperanzas gerundenses en el minuto 86.

Aún así, el Girona todavía tuvo tiempo de volver a darle emoción al partido. 2 minutos antes de llegar antes de llegar al final del partido, Juanpe remató un córner y anotó el tercer gol para los suyos. «L’Orgull Gironí» no estaba muerto del todo. Con el partido loco, Cristiano Ronaldo se encargó de liquidar al Girona por tercera y definitiva vez, anotando su cuarto gol del encuentro tras un nuevo pase de Kross. Póker, exhibición y un nuevo balón para el museo de CR7.

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