Era un 28 de Marzo de 1978 cuando la Escuela de Fútbol Ángel Viejo Feliú, más conocida por Escuela de Fútbol de Mareo, era inaugurada con el fin de dotar al club gijonés unas instalaciones modernas donde entrenar y asentar su estructura. Cuarenta años la ciudad deportiva del Real Sporting de Gijón se ha convertido en uno de los referentes futbolísticos del país.
Cuarenta años de fútbol en Mareo. Cuatro décadas que si hablasen nos contarían historias de jugadores como Luis Enrique, Manjarín, Abelardo, Juanele, Villa entre otros que se hicieron un nombre en estas instalaciones. Hoy 28 de Marzo de 2018, la Escuela de Fútbol de Mareo, está de aniversario pues cumple 40 años. Una ciudad deportiva dotada con cuatro campos de hierba natural, tres de hierba artificial, uno de fútbol ocho, una pista de fútbol sala y una de fútbol playa son las actuales instalaciones.
Situado a escasos kilómetros de Gijón, las instalaciones ocupan un total de 112.000 metros cuadrados. Pero no siempre han sido iguales. Durante sus cuarenta años ha sufrido muchas remodelaciones. Inicialmente apenas constaba de seis campos: cuatro de hierba natural y dos de arena. La última de ellas fue en 2016, cuando los campos 3 y 6 fueron transformados en sintéticos. Además también se produjo una inversión en la remodelación de casi todos los vestuarios de la escuela.
Mareo nace para dotar al Sporting de unas instalaciones dignas y modernas
Corría el año 1974 cuando el Sporting, presidido por Ángel Viejo Feliu y en Primera División, cuando se dieron los primeros pasos. En Enero de ese año el Sporting negoció con el técnico yugoslavo Branko Zebec para que fuese su entrenador. Un entrenador de postín, que venía del Hadjuk Split y en 1969 había ganado la Bundesliga con el Bayern Munich. Zebec llegó a Gijón, pero apenas estuvo unos días. Cuando vio las precarias instalaciones del Sporting rompió el acuerdo y abandonó la ciudad.
Por aquel entonces el Sporting se entrenaba en distintos campos de fútbol de la ciudad, como el de Los Fresnos. Campos que, sobre todo en invierno, se encontraban en malas condiciones y los entrenamientos no eran idóneos. Tras la espantada del entrenador yugoslavo, Viejo Feliú se plantea adquirir unos terrenos. Y así sobre ellos levantar una ciudad deportiva moderna y a la altura de un club élite. Para financiarla se acometió en 1976 un traspaso de uno de los grandes jugadores del Sporting en aquella época. No era otro que Ignacio Churruca al que el Sporting traspasó al Athletic Club por 50 millones de pesetas.
Con ese dinero se adquirieron unos terrenos en la parroquia rural gijonesa de Leorio. Y diseñada por el arquitecto Miguel Díaz Negrete, se levantó lo que hoy en día es Mareo. Fue inagurada el 28 de Marzo de 1978 por el presidente de la RFEF, Pablo Porta. Viejo Feliú ya no era presidente del Sporting por esas fechas. Había cedido su cargo a Manuel Vega-Arango Alvaré hacía ocho meses. Pero su sueño ya era una realidad. Mareo se convertiría en un baluarte del Real Sporting de Gijón.
La crisis económica del club llevó al Ayuntamiento de Gijón a comprar Mareo
Mareo permitió al Sporting tener unas instalaciones que eran referencia en el país. Con los años y un buen trabajo de cantera, dieron sus frutos. Jugadores, que llegarían a ser internacionales como Luis Enrique, Manjarín, Abelardo, Juanele y más tarde Villa, saldrían de su escuela.
Pero Mareo también fue el principal salvavidas del Sporting en los momentos delicados. Las instalaciones le sirvieron como soporte económico en 2001. En verano de 2001 el Sporting atravesaba un momento financiero muy delicado. Las deudas con la AEAT ahogaban a la entidad, motivo por el cual vendió por 12 millones de euros las instalaciones al Ayuntamiento de Gijón. Se consideró que el precio era muy bajo, pero el ahogamiento financiero obligó a la entidad a traspasar la titularidad de la ciudad deportiva, que hoy en día sigue siendo de propiedad municipal.
Hoy en día, el Sporting quiere recuperar Mareo. Pero el Ayuntamiento de Gijón no está dispuesto a regalarlo y las posturas negociadoras para un retorno de la propiedad están muy alejadas. Y más con la entidad compitiendo en la Liga 1|2|3. Con la entidad prácticamente saneada, un ascenso a la Liga Santander podría relanzar esas negociaciones. Y quizá el Sporting recuperaría así algo que nunca debió dejar de ser suyo.