GOLDEN STATE WARRIORS
Los Golden State Warriors se han clasificado en 2ª posición en la Conferencia Oeste de la NBA. Su rival, los San Antonio Spurs no llegan en su mejor momento, pero esta eliminatoria, la reedición de la final de Conferencia del año pasado promete ser apasionante. De momento, será una eliminatoria con ausencias. La más importante para el equipo californiano será la de una de sus estrellas, Stephen Curry.
Curry se lesionó su rodilla, precisamente ante los Spurs, tras volver de otra lesión de tobillo. Mientras tanto, los Warriors han tratado de vivir sin él. Y también sin Kevin Durant, Draymond Green o Klay Thompson, los cuales también han sufrido problemas físicos en estos últimos partidos de temporada.
Precisamente esas ausencias han lastrado potencial al equipo en este tramo final. Los Warriors, menos fiables en cuanto a resultados durante toda la temporada, han sido líderes destacados en la División Pacífico, pero su récord de victorias no ha sido, ni mucho menos, el de temporadas precedentes. Han sido 29 victorias y 12 derrotas y los mismos registros fuera del Oracle Arena. Unos números muy diferentes a lo que están acostumbrados los aficionados de los Warriors en estas últimas exitosas temporadas.
Cuando las piezas clave de los Warriors están sanos, son un equipo perfecto. Stephen Curry y Kevin Durant han promediado 26´4 puntos en la temporada y Klay Thompson 20. Los Warriors practican un baloncesto alegre y ofensivo y promedian 113´5 puntos de media (1º de la liga). Esa fluidez en ataque también hace que descuiden su defensa ya que con 107´50 puntos por partido son el 18º equipo en defensa. Y eso que jugadores como Kevin Durant han mejorado considerablemente en defensa. Otros como Draymond Green siguen aportando su dosis habitual de garra y es uno de los jugadores más completos de una liga en la que ha promediado 11 puntos, 7´6 rebotes y 7´3 asistencias.
Desde que empezó marzo, los Warriors han cosechado 9 derrotas, las mismas que hace 2 temporadas, la del famoso 73-9. Por eso, este final de Regular Season ha dejado preocupados a los aficionados en la bahía. Y más tras perder por 40 puntos en el último partido frente a los Utah Jazz.
Esta primera ronda frente a los Spurs, una ronda que se prevé dura, Steve Kerr contará con el base Quinn Cook como sustituto de Curry. Con Thompson y Durant como estiletes, el técnico de Arizona puede apostar por el “small ball” con Green en el puesto de 5 para defender a Aldridge. El balance de ambos equipos en esta temporada es de 3-1 para los Warriors, pero este final de temporada regular no debe hacer confiarse a unos Warriors que, con permiso de los Rockets, aspiran a todo.
SAN ANTONIO SPURS
Hablar de los San Antonio Spurs y de los PlayOffs es hablar de una historia de amor, una historia de amor que dura ya 21 años. El equipo de Gregg Popovich no falta a su cita desde entonces, y eso que, este año han sido de los más complicados para los texanos. La durísima competitividad que se ha vivido en la Conferencia Oeste ha hecho peligrar los puestos de honor para unos Spurs que, durante toda la temporada han sufrido la ausencia por lesión de su gran estrella Kawhi Leonard. El alero, lesionado desde la final de conferencia del año pasado, precisamente frente a los Warriors, solamente ha jugado 9 partidos, con restricción de minutos, en los que ha demostrado su calidad, pero nuevamente los cuádriceps le han dejado en el dique seco, y esta vez, parece que sin fecha de retorno. Además, los continuos rumores sobre su mala relación con su técnico y los posibles ecos de traspaso han sido un constante este año.
Precisamente, ese runrún durante todo el año parece haber despistado a los Spurs. Este año se han clasificado en 7ª posición en el salvaje oeste, una 7ª posición que junto a la 8ª nadie quería por la categoría de los rivales de PlayOffs. Y los Spurs no han estado finos. Por primera vez en muchas temporadas no han llegado a las 50 victorias, quedándose con 47-35 lo que le ha servido para terminar en la 3ª posición en el sudoeste.
Pero los Spurs han hecho del AT&T Center un auténtico fortín. 33 victorias en 41 partidos son su balance esta temporada en casa. Precisamente, los partidos fuera de casa han sido su lastre donde solamente han conseguido 14 victorias. Ahora, con el factor cancha en contra en primera ronda por primera vez en muchos años, tendrán una auténtica prueba de fuego.
Pero los Spurs tienen un plan, Popovich tiene un plan. Sin duda, se debe apoyar en la buena temporada de LaMarcus Aldridge. El ala-pívot texano se ha echado el equipo a las espaldas durante una temporada en la que ha promediado más de 23 puntos y 8 rebotes por partido. Son buenas cifras si tenemos en cuenta que Popovich no es amigo de cargar de minutos a sus jugadores. Las rotaciones y el reparto equitativo durante los partidos suele ser algo habitual. Otros jugadores como Dejounte Murray, Kyle Anderson o Patty Mills han devuelto la confianza del veterano técnico y han respondido con buenos partidos. En la parte menos buena, hay que hablar de los veteranos. Rudy Gay no ha tenido continuidad en el juego debido a las lesiones y jugadores como Pau Gasol o Tony Parker han visto reducidos considerablemente sus minutos de juego, y con ello sus cifras. Caso aparte es Manu Ginóbili. El escolta argentino, con sus 40 años, sigue cumpliendo a la perfección con lo que le propone su técnico y ha sido un auténtico desatascador en algunos partidos que han necesitado de su habitual garra.
Pero Popovich siempre guarda algún as en la manga y sus variantes técnicas y tácticas siempre sorprenden. A los Spurs nunca hay que darles por muertos. Cuando peor pintaban las cosas para la franquicia texana, una gran racha de 6 victorias en 10 días les metieron en los puestos nobles de las clasificación. Clasificación que se ganaron en la penúltima jornada y que les ha deparado este complicado duelo tras perder el último partido de la fase regular frente a los Pelicans.
El duelo entre Warriors y Spurs serán cuanto menos apasionante. Los Warriors son claramente favoritos ante unos Spurs a los que parece que se les acaba este ciclo. Precisamente el habitual alto ritmo de juego y anotación de los Warriors debe ser un punto que decante la balanza para los de la bahía de San Francisco. Los Spurs harán del AT&T Center una caldera, con el recuerdo del episodio entre Leonard y Pachulia el año pasado y tratarán de imponer una táctica defensiva que asfixie a los Warriors, como ocurrió en el último choque entre ambos.
Los pronósticos dan como favoritos a los Warriors, los cuales saben que esta eliminatoria no será, a priori, tan sencilla como otras primeras rondas anteriores en las que no conocieron la derrota.
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