Tras el último entrenamiento de la semana que ha llevado a cabo el CD Lugo en el Anxo Carro y antes de poner rumbo a Pamplona el técnico albivermello, Francisco Rodríguez, ha comparecido antes los medios de comunicación.
El míster ha señalado la cita de Pamplona como la primera de las oportunidades para intentar superar el bache sufrido en las últimas jornadas: «Tenemos que intentar salir de la mala imagen que hemos dado en los últimos dos partidos. Hemos perdido muchas cosas de nuestro modelo de juego, de nuestra identidad, de nuestro compromiso, pero es que también hemos perdido muchas cosas. Al final ahora mismo está compitiendo gente que en la primera vuelta no estaba ni en las convocatorias. Entonces hay que ser realistas. Yo estoy muy contento con cada uno de ellos, pero quizás no estamos en nuestro mejor momento a nivel físico y a nivel mental. Nos quedan seis partidos para resarcirnos, para que terminemos bien y que la gente demuestre que tenemos calidad y ambición suficiente para salir de este bache.»
Un partido que los de Francisco afrontan con bajas pero, como ha confesado el míster, con la ambición de volver a competir: “Estamos los justos para ir a Pamplona, pero los que hay están convencidos, están por la labor. Como yo siempre digo no merecemos terminar de esta manera, así que vamos a competir mañana. Independientemente del resultado el equipo tiene que competir, tiene que dar la cara y salir de los que hemos hecho en estos dos últimos partidos.»
Enfrente uno de los clubes con más potencial de LaLiga1|2|3: «Un equipo con un presupuesto que nos puede triplicar o cuadruplicar, que ha pagado traspasos, que tiene a los mejores de la categoría y que tiene otra meta que la nuestra. Será un partido difícil en un campo espectacular, lleno de gente. Sera un partido complicado que tenemos que querer jugar y saber jugar. además de tener la ambición de competir e ir a ganar.»
Un reto difícil, pero que ofrece la primera oportunidad para lograr el principal objetivo de Francisco actualmente, recuperar el ánimo de sus hombres: «Los jugadores merecen terminar de otra manera, no con los silbidos que se oyeron el otro día. Los respeto a pesar de que por momentos no los comparto. Lo que me importa ahora mismo son mis jugadores, recuperar su ánimo y llegar con ellos hasta el final, que es lo que hemos hecho desde el principio.»