La primera temporada de Marcelino en el Valencia ha sido sobresaliente, por encima de cualquier expectativa, el conjunto valencianista ha brillado con luz propia, logrando la clasificación a la próxima Liga de Campeones y alzándose como el cuarto equipo de la Liga. La clasificación europea obliga al equipo ché a buscar refuerzos para competir con el mayor nivel posible en tres competiciones.
El principal problema del Valencia es la amenaza del Fair Play Financiero, lo que aleja a algunos futbolistas como Maksimovic de la órbita del equipo del Turia. La directiva se ve en la obligación de buscar cesiones con opción a compra para rebajar gastos, siendo la de André Gomes la primera opción para reforzar el mediocampo.
El futbolista portugués abandonó Valencia hace dos temporadas rumbo a Barcelona en una operación que no dejó a nadie indiferente, porque el Barça se hizo con él por un precio base menor al que ofreció el Chelsea varias semanas antes. La baza que puede sacar la directiva valencianista es renunciar a alguna de las cláusulas en caso de lograr la cesión así como pagarle al portugués el sueldo al completo, otra opción es incluir una opción de compra en caso de objetivos cercana a los 30 millones.