Al hablar de Marc Márquez estamos haciendo referencia a múltiples valores deportivos: pasión, valentía, honradez y, por encima de todo, historia. El piloto español también es un genio fuera de la pista: «No me quiero poner un objetivo, ni tampoco ponerme un número de Mundiales para que no se convierta en una obsesión, porque a base de obsesionarse no se consiguen las cosas».
«Las sensaciones son lo que me motivan»
Al contrario que Valentino Rossi, quien públicamente es más de fijar objetivos concretos, Márquez insistió: «Se consigue a base de motivación a motivación», afirma el campeón del mundo. Durante una temporada, la principal motivación es ganar el título, pero a lo largo de ella vas encontrando diferentes motivaciones. En Austin, me motivó lo que pasó en Argentina. En la carrera de Argentina, me motivó la sanción y así voy buscando objetivos a más corto plazo que me ayudan a motivarme»