A pocas horas de que empiece el gran derbi, la ciudad de Sevilla se encuentra paralizada. Aficionados de todos los rincones sacan su escudo a relucir y no existe mayor máxima que animar a los suyos. Precisamente esto es lo que han hecho los aficionados del Betis a las puertas del hotel de concentración. Entre gritos, cántico, bufandeo desenfrenado y en piña fueron recibidos los jugadores del equipo bético a la entrada del hotel de concentración en el autobús.
La afición está volcada
Después de la gran temporada que ha cosechado el cuadro de Quique Setién, la afición está con el equipo más que nunca. Con la ya clasificación matemática para la próxima edición de Europa League, solo queda disfrutar del final de temporada y preparar la siguiente.
El Benito Villamarín abrirá sus puertas a las 17:00 para que toda la gente puede ir entrando sin prisas. Se esperan más de 60.000 personas en el partido. El club ya ha colgado el cartel de ´no hay billetes´ a la entrada de las taquillas. Un lleno absoluto para disfrutar de uno de los mejores partidos de La Liga.