Juan Carlos Unzué ha dejado muy abierta la puerta de salida y ya ha preparado incluso el discurso. «Desgasta mucho más ser primer entrenador. El cambio es mucho más grande pero esto lo siente lo mismo el entrenador del juvenil que el del Barcelona que el del primer equipo del Celta. La diferencia es el rol», afirmó
«Me enganché a esto por la sensación de trasladar a los jugadores algo de lo que he aprendido en mi carrera. Si he podido dejar algo en la mente de los jugadores del Celta para el futuro, habrá merecido la pena esta experiencia. Tan mal no lo habremos hecho cuando hay seis jugadores en boca de equipos de primer nivel».
Su relación con la grada. «A la gente no le puedes pedir nada, tienes que darle resultados que les hagan felices. Hubo 3,4,5 partidos que teníamos que haber ganado y no lo conseguimos y genera dudas en la gente. Berizzo fue alguien importante en el Celta como entrenador y jugador. Yo intenté ser Juan Carlos Unzué».
El último partido. «Es importante demostrar profesionalidad, hasta el último momento, sea la situación que sea. Hay en juego orgullo e imagen. Vamos a pelear. Cuando sales a un terreno de juego, a nadie le gusta quedar en evidencia. Sacaré un equipo competitivo, sin muchos cambios».