No han tenido el inicio de campeonato más sencillo, pero parece que ahora Red Bull tiene todo de cara para salir de del GP de Mónaco con el trofeo de vencedor bajo el brazo. Daniel Ricciardo ha sido el encargado de liderar las dos sesiones de libres por delante en ambos casos de su compañero, Max Verstappen. Parece que la ventaja que tienen los austriacos sobre Ferrari y Mercedes es considerable en el sinuoso trazado de la costa azul.
La primera sesión arrancaba con un accidente por parte de Sergey Sirotkin en la recta principal. En una maniobra muy extraña el piloto ruso hacía que su Williams tocara el muro y sufriera un pinchazo y una rotura de llanta. Tanto el piloto ruso como Lance Stroll llegan a Mónaco sabiendo que tienen un coche extremadamente lento, con lo que el manejo de la presión se hace clave para los de Groove.
Tampoco andaban bien encaminados en McLaren. Esta vez le tocaba a Fernando Alonso sufrir una pérdida de presión en los frenos, provocando que el piloto ovetense se perdiese gran parte de la sesión. Más tarde le tocaba a otro de los clientes de Renault sufrir algún tipo de problema. Era el Red Bull de Max Verstappen, que presentaba complicaciones en el DRS.
El piloto holandés no tenía su mejor día en la mañana de hoy. Tras pasarse de frenada en Santa Devota, Verstappen iniciaba una maniobra de marcha atrás para reincorporarse a pista. La FIA no veía con buenos ojos el movimiento y le abría una investigación al piloto de Red Bull. Finalmente la voluntad de la federación era no sancionar al joven piloto.
A pocos minutos de finalizar la sesión Alonso podía salir finalmente. Pero el poco margen de tiempo solo permitían al español situarse en decimoséptima posición. Carlos Sainz, sin embargo, se situaba sexto por delante de Valtteri Bottas. El madrileño siempre ha acabado en Mónaco entre los diez primeros y parece que este año está dispuesto a seguir manteniendo la estadística.
Ricciardo acababa la sesión en primera posición con Verstappen segundo y Lewis Hamilton tercero a tres décimas del australiano. La sorpresa de la sesión matutina era la alta degradación que sufrían los compuestos de Pirelli, algo que nadie esperaba. Pese a todo parece que la estrategia ideal de carrera seguirá siendo una parada.
La sesión de la tarde comenzaba de forma tranquila hasta la aparición de una bandera roja. La organización tenía que paralizar los entrenamientos por una tapa de alcantarilla que se encontraba mal fijada entre la curva 4 y 5. Tras una intensa labor por parte de los comisarios, la pista estaba de nuevo lista para que los monoplazas rodasen.
La sesión se puede resumir en una batalla entre los pilotos de Red Bull por obtener el récord del circuito. Finalmente Ricciardo se llevaría el gato al agua con un 1:11.841 que de momento es la vuelta más rápida jamás dada al trazado monegasco. El susto del día se lo llevaba un Verstappen que en uno de estos intentos se tocó con un Haas en la curva de Loews.
Finalmente la sesión vespertina acababa casi de la misma forma que la de la mañana. Los dos Red Bull en cabeza con Ricciardo por delante de Verstappen y Sebastian Vettel como tercero en discordia y a cinco décimas del australiano. Alonso y Sainz eran noveno y décimo respectivamente, ambos por detrás de sus compañeros de equipo.
Habrá que esperar al sábado para poder disfrutar de los últimos entrenamientos antes de la qualy. De momento todo apunta a Red Bull como claros favoritos en un circuito en el que prima el chasis sobre el motor. Por detrás de ellos Ferrari y Mercedes al mismo nivel, con McLaren y Renault liderando la mitad de parrilla. Force India y Toro Rosso intentarán hacer lo posible para colarse entre los de Enstone y Woking mientras que Haas, Sauber y Williams lucharán por no ser los últimos del pelotón.
Fotos vía: jamesallenonf1.com
No te olvides de dejar un comentario y seguirme a través de Twitter: @VaroF1