Rey de Champions
El Madrid hace historia alcanzando su décimo tercera champions, la tercera consecutiva
La final comenzó como todos esperábamos, ambos equipos iban a buscar la porteria contraria a la mínima oportunidad que tuvieran. Y así fue, el Liverpool en los primeros minutos llegaba en más ocasiones pero nunca encontraba el disparo claro para poner en peligro la portería rival, y el Madrid llegaba algo menos porque conservaba mucho más la pelota, pero cuando llegaba lo hacía con mucho peligro, de hecho en la primera clara Cristiano estuvo apunto de marcar en un remate que se le fue alto por muy poco.
La primera oportunidad clara de los ingleses llegaría en el 23 con una buena jugada por banda izquierda, en la que Firmino se encontró con Ramos en su disparo y en ese rechace Arnorl disparó con peligro pero Navas atajó con mucha seguridad.
Cuando los reds parecían estar en su mejor momento llegó un duro golpe para ellos, Salah iba a tener que abandonar el partido lesionado. A los pocos minutos el Madrid también iba tener que hacer otro cambio, ahora iba a ser Carvajal el que tenía que ser sustituido por lesión. Ambos dejaban el terreno de juego llorando de impotencia por perderse lo que restaba de final, y poner en peligro ambas presencias en el Mundial.
Y no sabemos si por casualidad o que lo notó y de qué manera, pero desde que Salah dejó el partido el Madrid se hizo dueño del balón y el poco peligro que vimos en el final de esta primera parte fue blanco. Primero con un gol anulado a Benzema por fuera de juego y después con un disparo al lateral de la red de Nacho en su primera incorporación al ataque.
El arranque de la seguna parte nos ofreció el mismo marco que en el final de la primera. El Madrid seguía dominando el juego y metiendo atrás a un Liverpool que seguía perdido sin su estrella en el campo. A los dos minutos de la reanudación la iba a tener Isco, se iba a encontrar con un rechace en el interior del área, pero su disparo lo iba a estrellar en el larguero.
Pero lo más sorprendente en la final estaba por llegar en el minuto 51 de juego, Karius incomprensiblemente se iba a confiar con el balón en sus manos, y en un intento de pasarlo a su defensa se iba a encontrar con la pierna de Benzema y con la sorpresa de que el balón iba a entrar llorando en su portería.
Segundo golpe durísimo para los de Klopp que a priori los dejaba bastante tocados. Pero a los 4 minutos de ese fallo de su portero se iban a encontrar con el empate a la salida de un córner, Lovren dejaría de cabeza el balón para que Mané se adelantara a Navas y pusiera el 1-1.
Pero Zidane se guardaba un as bajo la manga, y era la salida al campo del galés Gareth Bale, que a los 3 minutos de saltar al cesped iba a hacer la genialidad de la noche, golazo tremendo de chilena imposible después de un centro de Marcelo. Se volvía a colocar por delante el Madrid en un partido que en esta segunda estaba loco completamente.
Con el partido más loco si cabe las llegadas en ambas porterias no iban a parar de sucederse. Primero tuvo el empate Mané con un lanzamiento desde fuera del área que iba a acabar en el palo. Acto seguido la tuvo Cristiano en un mano a mano que no supo aprovechar. Y después de nuevo Benzema iba a aparecer con una espectacular volea, pero esta vez Karius estuvo acertado.
El desenlace de esta final de nuevo nos iba a mostrar a los dos jugadores claves del partido, aunque cada uno por distintas razones. Bale y Karius se volvían a ver las caras, y de nuevo con suertes dispares para cada uno. Disparo muy lejano del galés que el portero alemán se iba a tragar en otra acción muy desafortunada. Bale se convertía en el jugador del partido con sus dos goles que le daban la décimo tercera al conjunto blanco, y Karius en la oveja negra, porque dos fallos suyos clamorosos iban a costar sendos goles en contra para los ingleses.
Ya no existió más final tras este gol. El Madrid ganó un partido loco, sobre todo en la segunda parte, donde supo aprovechar la lesión de Salah para a partir de ahí ser el dominador del encuentro y ganar con justicia. El Liverpool por contra, no supo reponerse a esa lesión y solo Mané luchó en solitario por evitar lo que al final acabó sucediendo.
Décimo tercera champions para el Real Madrid que lo hace más Rey de Champions si cabe, es su tercer título consecutivo y su cuarto en cinco años.
@juanmajurten
