Tras el partido del Oviedo ante el Huesca, Juan Antonio Anquela dejó claro que quiere seguir en el club asturiano. El técnico jienense aseguró que «todavía no hemos hablado de la renovación, pero el club me quiere y yo me quiero quedar; dos y dos son cuatro». Además, en relación a su futuro, el preparador oviedista dejó claro que «he tenido otras opciones, yo quiero estar en el Oviedo. Estoy feliz, cada día valoro más a ese club y lo amo más. Veo el sentimiento de la gente y trato de trabajar y hacer las cosas bien. No podemos vivir de espaldas la realidad, el objetivo es sanear el club. Volveremos, seguro que volveremos. La gente lo merece».
En relación a la temporada de su equipo, Anquela fue claro: «El objetivo se gana día a día. ¿Tú me has oído a mí decir que el objetivo era eso? (playoff). Pregúntaselo al club. A mi objetivo le han faltado siete puestos, porque siempre es ser primeros», explicó. También añadió que «soy muy exigente, pero tengo que estar satisfecho, mucho. Nos hemos dejado el alma. Yo nunca he hablado de objetivos. Sí soy ambicioso, mucho, pero no he dicho que el objetivo era estar entre los seis primeros. El domingo pasado no valoramos un empate que hubiera valido, por poner un ejemplo. Claro que era mi deseo estar ahí y estamos desilusionados, muy desilusionados».
Anquela también dejó claro que su cabeza estaba en el Tartiere en el día de ayer. «Estaba pendiente de nuestro partido, pero las sensaciones se iban palpando. Fue un partido disputado, siempre tenemos que sufrir, es nuestro sino. Ha sido así todo el año y se nos queda esta cara. Desde el primer día dije que había que luchar hasta el último minuto del último partido y la pena es que la suerte no ha caído de nuestro lado. Son cuarenta y dos partidos y la cosa está muy justa, en algunos momentos nos hemos equivocado y por eso no estamos. Competimos, a veces sale bien y otras no tanto. No nos metemos por el goal-average, hay que levantarse y hacer las cosas bien para volver a competir», explicó.
El 1×1 del Oviedo ante la Cultural
- Alfonso Herrero. Sostuvo al equipo durante todo el partido. Realizó dos paradas sensacionales. No pudo hacer nada en el gol visitante.
- Cotugno. Estuvo serio en defensa durante todo el partido, aunque no se le vio mucho en ataque.
- Forlín. Cuajó un partido sensacional en su baile particular con el Cucho Hernández. Sufrió en la salida de balón.
- Christian Fernández. Firmó un gran partido defensivamente. Supo leer a la perfección todos los ataques rivales.
- Mossa. Apenas sufrió en defensa. En ataque apareció para asociarse a Aarón.
- Folch. Llevó la manija del partido en todo momento. No perdió el balón, jugó con criterio y dio equilibrio.
- Rocha. De lo mejor del Oviedo. Derroche físico sensacional. Defendió a la perfección y llegó a área rival.
- Johannesson. Despidió la temporada recordando al mejor Diegui. Subió la banda, llegó a área rival y anotó un gol.
- Fabbrini. Siempre la pidió para intentar algo diferente. Le faltó algo de claridad.
- Aarón Ñíguez. Tuvo que hacer de Saúl. Asistió a Linares en el segundo. Además, lo intentó durante todo el partido. Ovacionado en el cambio.
- Linares. Pudo jugar su último partido de azul. Aunque falló un penalti y el rechace, el aragonés no se vino abajo y logró hacer el segundo de cabeza.
Los cambios
- Toché. Sustituyó a un ovacionado Linares. Lo dio todo en la presión, pero no tuvo opciones de gol.
- Varela. Saltó al césped para formar un doble lateral con Mossa por la izquierda. No sufrió en defensa.
- Hidi. Apenas intervino.
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