Tras el anuncio en el día de ayer de la no continuidad del ya ex entrenador del Albacete Balompié, Enrique Martín, hoy el club ha dado a conocer a lo largo del día numerosas salidas de jugadores.
El primero en anunciar su no continuidad en el equipo manchego lo comunicaba el propio Dani Rodríguez mediante una carta de despedidas publicada en sus redes. El gallego, que ha permanecido en el club dos temporadas y que logró el ascenso a Segunda División, finalizaba contrato el próximo 30 de junio y su próximo destino parece ser que será un recién ascendido a Segunda, el Mallorca.
Otros dos jugadores que también finalizaban contrato el próximo 30 de junio y que no continuarán en el conjunto blanco son el lateral izquierdo David Morillas y el portero Rubén Miño. El primero de ellos ha disputado esta temporada 25 partidos, 17 de ellos completos; mientras que el segundo llegó en el pasado mercado de invierno y no ha disputado ningún minuto con la elástica blanca.
El resto de salidas son de jugadores cedidos y que regresan a sus equipos de origen. El primero de ellos es Esteban Saveljich, el defensa argentino regresa al Levante UD. El argentino no ha podido volver a vestir la camiseta del Alba por sanción en marzo cuando fue expulsado ante el CA Osasuna y después por una inoportuna lesión.
Héctor Hernández regresa al Atlético de Madrid tras disputar dos temporadas con el club manchego. En su primera temporada (2016-2017) marcó 20 goles en 33 apariciones, siendo pieza fundamental en el ascenso a La Liga 123. Este pasado verano, el club volvió a reclamar su cesión y ha jugado 16 partidos en los que ha marcado dos goles.
Por su parte, Miguel Ángel Garrido Cifuentes ‘Cifu’ regresa al Málaga Club de Fútbol, del que llegó en el mes de enero y ha disputado ocho partidos, cinco de ellos completos. Por último, César de la Hoz regresa al Real Betis Balompié, equipo del que llegó en verano. El cántabro ha disputado 33 partidos esta temporada en los que ha anotado cuatro goles. En el recuerdo quedará el doblete al Sevilla Atlético y sobre todo el gol frente al Tenerife que certificaba la permanencia del Alba.