Con la vuelta a los entrenamientos previstos para el próximo lunes 9 de julio en el Anexo de la Rosaleda, todavía no hay ninguna llegada al equipo dirigido por Muñiz. Pero es el que el plantel malaguista tiene muchos frentes abiertos y hay un gran número de jugadores con ficha que deben salir para rebajar la mala salarial y a la vez intentar conseguir algún traspaso que pueda dar margen de movimientos a la hora de fichar.
El poder dar salida a muchos jugadores que no cuentan, o tienen un sueldo insostenible para la categoría es la gran prioridad ahora mismo, porque ni todos los jugadores tienen firmada la clausula de bajada de sueldo al descender de categoría, ni todos se conforman jugando en segunda y con la mitad de sueldo. La «papeleta» es complicada, lo que obliga a escuchar ofertas por casi todos los jugadores que puedan dejar dinero en las arcas y rebaje los gastos en salarios.
Por otra parte están los jugadores que ante la mala temporada realizada, su alto sueldo y sus pretensiones económicas no están recibiendo ofertas y el Málaga sigue intentando cerrar un acuerdo con esos intregrantes para rescindir el contrato que los une. Muchos de éstos jugadores, últimos causantes del descenso, no están colaborando con la entidad y no ponen fácil su salida.
Sólo Jony, cedido al Alavés, y Cecchini, cedido al Banfield argentino, han dejado hueco en la plantilla. Lógicamente también han dejado la entidad los jugadores que estaban cedidos, o como Chory Castro que ha preferido no renovar y volver al Nacional de Uruguay.
Parecen algo más encaminadas las posibles salidas de Michael Santos hacia el Copenhague que ha realizado una oferta de 4 millones por el delantero uruguayo. El Málaga vería con buenos ojos su traspaso, ya que si algún equipo de primera se interesara por su cesión, Caminero se verïa obligado ha cederlo como ocurrió con Jony y no se percibiría ningún euro por un jugador que no parece tampoco muy interesado en volver a vestir la camiseta malaguista.
Otro jugador en la rampa de salida es Roberto Rosales, que a pesar de la mala temporada sigue teniendo cartel. Además de que no acabó muy bien en la Rosaleda, tampoco presenta interés por jugar en segunda por lo que el Málaga vería interesante un traspaso para ahorrarse una gran ficha y obtener algún beneficio. Aunque sonó el Betis con fuerza, parece ser que el Girona ya tiene cerrado el acuerdo con el jugador, pero falta que Eusebio, nuevo míster del equipo catalán, cierre su proyecto de necesidades.
Adrián gusta mucho en el Leganés de Pellegrino y parece que las conversaciones van avanzando y seguramente pueda dejar el club malaguista.
Bakary Koné, que vuelve de su cesión y no cuenta para el equipo costasoleño, parece gustar al Trabzonspor, por lo que otra posible cesión haría que no volviera a vestir de blanquiazul ya que el africano acaba contrato el próximo junio.
Otro jugador que está recibiendo ofertas es Ignasi Miquel. Aunque el Málaga si cuenta con el joven jugador, el Getafe en boca de su presidente Ángel Torres, ha sido claro en su interés aprovechando que el propio Caminero ha intentato entablar conversaciones para conseguir a dos jugadores del equipo madrileño.
Otro jugador que podría ser difícil de retener es el marroquí En-Nesyri, que tras su gol a España se ha revalorizado, y al bajar a segunda su cláusula ha pasado de 20 a tan sólo 10 millones, una cantidad que pone al internacional marroquí en el escaparate de muchos equipos.
Primeras nacionales como el Leganés, Alavés y Eibar lo venían siguiendo antes del mundial, además de equipos de la Premier por lo que la delantera malaguista se podría volver «a quedar en cuadros» y es un puesto que ya falló la pasada temporada mandando al equipo boquerón a segunda….
Muchos deberes que hacer y cada vez quedan menos días para que comience a rodar el balón.
Por @sergiogl65