Como el perro del hortelano
Ni juega, ni deja jugar. Ruben Baraja esta perdido y desquiciado y no lo digo yo; lo demuestra él.
Hoy en Mareo se vió uno de los ejercicios más interesantes que el entrenador rojiblanco ha hecho desde que empezó la pretemporada. Se trató de un ejercicio en un espacio reducido para sacar el balón jugado y crear líneas de pase. Por primera vez, por lo menos a puerta abierta, el vallisoletano ha trabajado la salida de balón con movimientos y no solamente poniendo a Nacho Méndez. Creo podemos, por fin, decir que está avanzando.
Eso lo puso en práctica posteriormente. Se jugó un partidillo once contra once para trabajar lo que se había practicado, siguiendo los cánones del entrenamiento, así que todo pintaba bien. Tras el parón para beber y colocar a los jugadores en el campo, dando las últimas indicaciones sobre como sacar el balón, empezó el ejercicio. Primera jugada y pifia atrás de Babin con el balón. Bueno, nada para preocuparse. Estás entrenando y es admisible fallar si luego se corrige el por qué del fallo.
En ese momento Baraja sacó a relucir su libreta y gritó un claro «no aprendemos» dejando claro su dominio del entrenamiento táctico. Mariño tenía que volver a sacar y la orden de Baraja fue clara «Diego sácalos de ahí» y se vino un poderoso melonazo del portero a la zona de Djurdjevic. Algo que, por ejemplo, no se hizo el pasado sábado en El Sadar ante la alta presión de Osasuna
Pero, lejos de buscar soluciones, a partir del fallo de Babin se pudo disfrutar de un poderoso intercambio de balones largos. Unos, permítanme lo diga así, ‘melonazos’; en los que jugadores como Lod se dedicaron a ejercitar el cuello y esperar un pase que nunca llegaba. Se trataba de sacar el balón jugado desde atrás con Nacho Méndez o Cofie, pero a la primera dificultad ya se sabía que había que hacer, balón largo y que se las apañen los de arriba. Una de las cosas que si hace un equipo de Baraja es presionar, aunque sea tímidamente, la salida de balón. Por lo que el balón estuvo mas tiempo fuera del campo o volando que siendo circulado con velocidad.
SI las conclusiones de Miguel Torrecilla sobre lo visto hoy en el entrenamiento son buenas, no me escondo para afirmar que el Sporting puede despedirse del ascenso directo.
Desquiciado
Eso se llama estar desquiciado. Algo que es habitual en los entrenadores que viven del resultado pero no los obtienen. Tienen mil ideas en la cabeza y no desarrollan en profundidad ni con calidad ninguna. No hay que irse muy atrás en este club para encontrar a a Paco Herrera o Abelardo en su último año. Y todos recordamos como acabo aquello.
El sábado te la juegas con la UD Las Palmas. Porque si no ganas te quedarás, como mínimo, a siete puntos del ascenso directo. Una distancia, que si bien queda mucho, ya será más que difícil de recuperar y más si tu entrenador esta desquiciado. Hoy Miguel Torrecilla bajó al campo por segunda vez esta temporada. No sé que conclusiones habrá tenido, pero si son buenas el Sporting no me escondo para afirmar que ya le puede decir adiós al ascenso directo.