El Sadar sigue siendo un fortín
Un efectivo Osasuna, que aprovechó muy bien sus ocasiones, se impuso a un compasivo Tenerife
Las grandes ligas de Europa se detienen, pero la categoría de plata del fútbol español se queda para dejarnos buenos partidos como este. El conjunto de Jagoba Arrasate venía de conseguir dos victorias consecutivas por primera vez esta temporada, mientras que el Tenerife no estaba firmando el inicio de temporada que esperaba.
La disputa comenzó con los visitantes poniendo la iniciativa en cuanto a la posesión. Durante los primeros minutos el dominio fue tinerfeño, aunque la mejor ocasión la tendría Villar en el minuto 6. No obstante, el delantero no perdonaría en la segunda ocasión: Osasuna abriría la lata en el minuto 10 después de que el Tenerife perdonase un mano a mano ante Naranjo.
En la jugada siguiente, Juan Villar remató a gol un centro desde la izquierda de Kike Barja. A pesar del duro golpe que supuso el gol, los blanquiazules no se arrugaron y continuaron llevando la iniciativa del partido. Sin embargo, el Osasuna se veía capaz de hacer daño con muy poco.
El partido continuaría en esta línea, con un Tenerife que dominaba la posesión mientras que los rojillos dominaban el partido. Las carencias defensivas de los tinerfeños, especialmente en las bandas, supuso que los locales comenzaran a dominar también en las mejores ocasiones. El Tenerife sufría en El Sadar, incapaz de atacar en profundidad, ante un Osasuna con su plantilla enchufada. Pudieron empatar el encuentro al borde del descanso mediante Tyronne en un tiro que acabó siendo desviado al saque de esquina. Pero una vez más, el Osasuna golpearía tras perdonar el Tenerife: Tras un mano a mano de Rubén García con Dani Hernández que desembocaría en un córner, los locales harían el segundo con el tiempo de descuento ya cumplido. El balón quedó rechazado tras un tiro de Barja para que Oier rematase a gol.
Con la polémica servida tras este gol tardío, los rojillos se fueron con 2 goles de ventaja al descanso. Los tinerfeños fueron de más a menos en un partido en el que el Osasuna supo aprovechar de manera muy eficiente las ocasiones de las que dispuso.
El segundo tiempo comenzaría con un cambio tempranero: Tyronne se marchó por lesión, incorporándose Suso Santana para suplirle. En el 54′ Osasuna seguiría haciendo sufrir al Tenerife: Un paradón de Dani Hernández, que estaba muy bien colocado, evitó un gol de Roberto Torres que se habilitó estupendamente tras un recorte. La réplica tinerfeña llegaría unos minutos después mediante Malbasic, que se plantó solo ante Rubén y tiró algo forzado debido a la presión de Lillo. Rubén sacaría otro disparo de Malbasic minutos después.
El Tenerife comenzaba a generar problemas a la zaga con balones a la espalda. Juan Villar pudo sentenciar el partido en el minuto 70 tras una ocasión clara que no pudo convertir y en la que pudo asistir a Nacho Vidal. Osasuna esperaba pacientemente para contragolpear mientras los canarios seguían intentándolo. Malbasic enviaría un disparo al palo en el minuto 77. Cuajó un enorme partido, solo le faltó el premio del gol. Se notó una clara mejoría en el combinado visitante durante la segunda parte, pero no la suficiente como para resquebrajar a los navarros. El partido terminaría con la última ocasión rojilla: Un centro de Rubén García desde la izquierda se pasearía por el área sin encontrar rematador.
Y sin moverse el marcador durante la segunda mitad se llegaría al final del partido, con un 2-0 que introduce momentáneamente a Osasuna en puestos de playoffs y que hunde un poco más a un Tenerife que aún no se ha encontrado esta temporada. Los de Arrasate aún no saben lo que es perder en su campo durante esta campaña liguera. En un partido que no estuvo exento de polémica debido al segundo gol local, el Tenerife estuvo algo falto de profundidad y quizás mereció algo más gracias a la mejoría que demostraron en la segunda parte.
Escrito por @ADelValle98