Con el empate en Old Trafford, el Arsenal encadena 20 partidos sin conocer la derrota en todas las competiciones (no pierde desde el 18 de agosto ante el Chelsea). Tras dos temporadas dubitativas en el Emirates, Unai Emery parece haber devuelto al conjunto gunner la personalidad y el gen competitivo perdido en las últimas campañas de Wenger al frente del equipo. Todas las piezas parecen encajar a la perfección en el sistema del técnico español. Matteo Guendouzi, un joven francés recién llegado es una de estas piezas que, de momento, parecen estar bien engrasadas.
Guendouzi ( Poissy,1999) llegó al Emirates este mismo verano desde el Lorient -equipo de Ligue 2- por una cifra cercana a las 8M€. Un jugador desconocido para el gran público, cuya llegada no hizo gran ruido y que recordaba, y mucho, a los extraños fichajes realizados durante las últimas temporadas de la era Wenger. Sin embargo, la aclimatación del francés fue excelente desde su llegada a Londres.
Una apuesta arriesgada
Mediocentro posicional, que se desarrolla en la misma posición que Torreira o Xhaka, por lo que su entrada no supone una variación en el sistema táctico del conjunto londinense. Zurdo, con buena conducción de balón y capacidad para asociarse a la perfección, pero sin olvidarse de las tareas defensivas. Pese a ello, el fichaje del pivote francés es una clara apuesta de futuro. Un fichaje muy alejado de la mayoría de jugadores que han aterrizado este verano en Londres (Sokratis, Lichsteiner o Leno). Guendouzi se formó en la academia del PSG hasta que el Lorient puso los ojos en él en 2014. Dos años después de llegar al conjunto de Bretaña, debutaba en Ligue 1 en una derrota ante el Nantes por 1-2.
Pese al buen hacer del franco-marroquí con el Lorient en Ligue 2, no ha sido un habitual en las convocatorias de las categorías inferiores francesas. No debutó hasta llegar a la sub18 y desde entonces ha jugado en todas las categorías. En total, solo ha sumado 14 partidos con las categorías inferiores. Aunque desde su llegada al Arsenal es un asiduo en las convocatorias de la sub21 francesa -donde es el jugador más joven-.
Personalidad desbordante
Si algo ha demostrado Guendouzi desde su llegada al Arsenal es personalidad. El francés ha demostrado que no se arruga ante nadie. La pide continuamente y pese a sus errores, propios de un jugador con tan poca experiencia en la élite, no se esconde y la vuelve a pedir. El magnífico partido que realizó ante el Manchester United es un claro ejemplo. Superó, en varias ocasiones, con mucha calidad la alta presión rival y ante jugadores físicamente superiores a él como Matiç o Fellaini -que solo pudo pararlo tirándole del pelo-.
Comenzó la temporada como titular ante la tardía incorporación de Lucas Torreira y ya entonces demostró sus virtudes. Con la llegada del uruguayo se ha visto relegado a un rol más secundario, pero está aprovechando a la perfección los minutos (1169) que le está dando el técnico vasco.
Esta personalidad ha llevado a Guendouzi a rechazar la propuesta de Hervé Renard para jugar con la selección marroquí. Teniendo en cuenta la dura competencia en el centro del campo francés, habrá que estar atentos a la decisión final del jugador gunner.