Repasamos el 2018 del CD Ebro. Un año con aprobado alto para los arlequinados, que rozaron jugar la fase de play-off dé ascenso a Segunda División A y en la actual, a pesar de un mal comienzo en liga, han hecho historia en su participación en la Copa del Rey.
Listón muy alto y cambios en el banquillo
Tras el parón vacacional de verano,la plantilla del CD Ebro volvía a los entrenamientos con una plantilla muy renovada y con cambio en el banquillo. Tras la marcha del anterior técnico, Emilio Larraz, al Racing de Ferrol, el equipo aragonés sufría una renovación absoluta después de quedarse en puertas de play-off de ascenso y clasificado para jugar Copa del Rey. Manolo González era el elegido para ocupar el banquillo de los de La Almozara y con él la llegada dé varios futbolistas para ocupar las bajas importantes de jugadores cómo Borja, Pajarero, Javi ”Bolo” o Diego Simón entre otros.
Comienzo irregular y sobresaliente en Copa del Rey
Los aragoneses no han tenido un comienzo de temporada muy positivo. El técnico gallego Manolo González, veía como su equipo, a pesar de jugar bien al fútbol, no tenía premio en la suma de puntos en la clasificación. Demasiados puntos que volaban, sobre todo en su feudo y que lo hacían caer a colista del grupo. Sin embargo si en liga las cosas no salían cómo se esperaba en Copa del Rey sería todo lo contrario. En primera ronda eliminaba al Marbella FC a domicilio. El Real Murcia sería el siguiente en segunda ronda.
Llegaría la tercera ronda y los maños se emparejaban con el Lleida y el factor campo a favor de los arlequinados. Los de La Almozara llegaban con mucho en juego. Por un lado hacer historia en el club y por otro que el equipo ganara confianza para salir de los puestos de descenso en Liga. Y llegó la tarde-noche mágica del CD Ebro. Los maños remontaban un gol del Lleida y se imponían finalmente por 2-1, consiguiendo meterse por primera vez en su historia en dieciseisavos de la Copa del Rey. El abrazo al finalizar el partido de su técnico González con sus familiares tras el pitido final, dejaba claro toda la tensión y sensaciones que, por fin, daban una alegría a la afición arlequinada.
El premio para los maños sería el europeo Valencia CF y era noticia en todos los diarios deportivos. Los aragoneses caían por la mínima en La Romareda, por 1-2 después de jugar más de una hora con un jugador menos. En el partido de vuelta los ché se imponían por 1-0 y ponían fin al sueño arlequinado, pero dejando una buena imagen en el coliseo valencianista.
Mejoria y confianza para la segunda vuelta
A raíz de los buenos resultados en Copa, también comenzaban a llegar en Liga. El equipo abandonaba los puestos de descenso gracias a una buena dinámica de resultados positivos y no encajar goles. Unos, por fin buenos resultados, que le hacían ganar confianza y tranquilidad al equipo maño.
El Ebro en las dieciocho jornadas disputadas ha ganado dos partidos como local. Fue ante Villarreal ‘B’ y CD Teruel. Mismo número de triunfos lejos de La Almozara: ante Peralada y Ontinyent. En cuanto a empates ha repartido los puntos en cuatro partidos como local. Fue ante Badalona, Alcoyano, Conquense y Olot. Lo mismo que a domicilio, donde firmó tablas ante Castellón, Ejea, Barca ‘B’ y Espanyol ‘B’. Un total de veinte puntos qué lo colocan en decimocuarta posición y con mucha capacidad de mejora para afrontar la segunda vuelta.