El Sadar es un verdadero fortín

La vigésimo segunda jornada de La Liga 123, dejaba un partido con miras altas. Navarros y baleares buscaban asentarse en la parte noble de la tabla. Los de Jagoba Arrasate se presentaban como anfitriones casi intratables ante el Mallorca de Vicente Moreno que quería plantar cara al mejor local de la categoría.

El inicio del partido quedó marcado por un error clamoroso de Manolo Reina que dejaba en bandeja el balón a Kike Barja que no perdonaba a portería vacía. 1-0 a los cuatro minutos de partido y la hazaña que intentaba el Mallorca se complicaba. Las bajas del equipo balear se notaban. La ausencia de Marc Pedraza se notaba y  Baba, que le sustituía, andaba perdido en la organización de los barralets. Osasuna por su parte, intentaba crear peligro con centros laterales pero que no conseguían generar mucho peligro. Raíllo y Valjent se mostraban solventes como siempre en sus labores. El primer acto finalizaba con un lanzamiento de Sastre que se iba cerca del larguero. La única ocasión de un Mallorca inoperante en El Sadar.

Tras el paso por los vestuarios, el partido se inclinó hacia los intereses baleares pero sin excesivo peligro. Salva Sevilla hizo adelantar las líneas a su equipo, pero no acompañaba su compañero en el eje balear. Por su parte, Osasuna quería buscar las cosquillas con sus transiciones vertiginosas. Kike Barja y Roberto Torres conducían el ataque osasunista con peligro, Sastre y Estupiñán se dedicaban más a defender las incursiones de los extremos que de atacar las intentonas de su equipo.

Aunque la primera ocasión de la segunda parte fue por parte del Mallorca. Dani Rodríguez tenía el empate tras una mala salida de Rubén, pero no pudo materializar el error y el portero del conjunto navarro fue capaz de redimirse y salvar el empate bermellón. Tras esa ocasión, los de Vicente Moreno desaparecieron en facetas ofensivas. Álex López lo intentaba pero en ningún momento consiguió generar algo positivo. En el 61′, un error en la salida de pelota propició en 2-0. Manolo Reina volvía a fallar y Roberto Torres no fallaba otra vez sin portero.

Tras la sentencia local, Vicente Moreno intentaba buscar el empate a la desesperada y daba entrada a Budimir -que debutaba- y a Aridai. El resultado fue el mismo, con un partido más que sentenciado, los cambios no generaron ninguna alteración en el devenir del encuentro. De hecho, fue Xisco el que puso en problemas a la zaga balear, aunque el mallorquín erró ante el equipo de su tierra. En las postrimerías del encuentro, Salva Sevilla, hizo lucirse a un Rubén que solo tuvo que intervenir dos veces en todo el encuentro, pero con sobresaliente.

Noventa minutos que mantienen invicto a Osasuna en su feudo y le alejan del Mallorca que sigue evidenciado problemas en sus desplazamientos lejos de Son Moix. Tres puntos que acercan a los navarros a puestos de ascenso directo y dejan al Mallorca fuera de playoff.