Injusticia en el añadido en el Antonio Puchades
Tarde desagradable en la Ciudad Deportiva con un molesto viento que dificultó el juego de ambos equipos.
El fútbol fue injusto con el filial valencianista en la tarde del sábado en el Antonio Puchades de la Ciudad Deportiva del Valencia CF. Sin hacer un gran partido, dispuso de las mejores oportunidades y fue más incisivo que su rival. Un Atco. Levante que se mantuvo vivo hasta el final y supo aprovechar su casi única oportunidad en todo el partido.
Primera parte sin mucho fútbol
Tarde fría y desapacible en Paterna, con un incómodo aire que dificultaba en gran manera las evoluciones sobre el terreno de juego. Los primeros minutos del partido fueron de tanteo y de evitar fallos por parte de ambos equipos que arriesgaban muy poco para evitar pérdidas en zonas de inicio. Las primeras oportunidades cayeron de lado blanquinegro, si bien no llegaron a inquietar a un seguro Cárdenas. El Valencia dominaba el partido pero sin crear peligro alguno. La sala de máquinas del Mestalla no carburaba con Kata y A. Corredera, y los tres centrocampistas granotas les cerraban todos los caminos hacia sus delanteros. La oportunidad más clara la tuvo el equipo de Miguel Grau en una jugada a balón parado en la que el aire envenenó el chut del 8 valencianista que a punto estuvo de sorprender al guardamente blaugrana.
El Valencia mejora sus prestaciones
La salida tras el paso por vestuarios nos trajo a un conjunto, el local, más agresivo en la presión y con una mejor circulación de balón. Los de Tevenet se limitaban a lanzar tímidos contraataques que nunca inquietaron a un Christian Rivero que daba síntomas de cierto nerviosismo. Fruto de esta mayor presión y del mejor juego, vendrían las oportunidades de gol más claras para los propietarios del terreno de juego. Sekou y Fran Navarro serían los protagonistas pero en ningún caso consiguieron llevar el balón a las redes del Atco Levante. Los levantinistas empezaron a sacudirse esa presión y Arturo Molina dispondría de una buena oportunidad que no aprovecharía y cuyo rechace del meta tampoco sería rentabilizado por la delantera visitante.
Un desenlace inesperado
Tras un extraño saque de banda decretado por el colegiado murciano, el balón llegó al área del filial y el meta local derribó a Joan en un penalty que decretó sin dudas el colegiado y que Pepelu transformó en el definitivo 0-1. Excesivo castigo para los jovenes valencianistas y demasiado premio para un conservador conjunto blaugrana.
@VicentSarrion @G3_VCF
Foto destacada vía: Vicent Sarrión