Bienvenidos a la dictadura del fútbol

Las cámaras de GOL, bajo las órdenes del presidente de La Liga, cambian sus tiros de cámara en los partidos que han retransmitido al Deportivo Alavés celebrados en lunes.

La asociación de peñas del Deportivo Alavés, como protesta a tanto partido fuera del fin de semana, ha realizado varias actuaciones que no han sentado nada bien en el seno de La Liga. Concretamente a Javier Tebas.

Recordamos que cuando se establecieron estos horarios de viernes y lunes, Tebas afirmó que los derbys no iban a jugarse en estas fechas, para favorecer el desplazamiento de los aficionados, y para que se vivieran como una fiesta, así se celebran en Vitoria. Pues bien, en la primera vuelta Alavés-Athletic en lunes y el viernes de esa misma semana, Real Sociedad-Alavés.

La relación entre Javier Tebas y la hinchada alavesista ha sido muy mala desde que éste fuera el abogado asesor y defensor de Dimitri Pitterman, quien dejó el club como un solar y al borde de la desaparición, tras el espolio de cantidades ingentes de dinero. No olvidemos que Pitterman, «el innombrable» entre la afición alavesista, está condenado en firme por la justicia española, pero está atrincherado en EEUU, donde continua con su vida, gracias a Tebas.

Desde muy joven unido políticamente a la extrema derecha, parece que quiere rememorar antiguos usos para controlar con mano de hierro, bajo pena «capital», a la prensa que no es de su cuerda. Una persona con su posición no debería pronuciarse en sentido político, hace unas semanas se declaró seguidor de VOX y animaba a votarles en «El Partidazo de Cope».

A nadie se le puede escapar la comparación de éste caso con las declaraciones de Piqué pidiendo libertad para ejercer el derecho al voto del pueblo catalán, sin que con ello incitara a votar una cosa u otra. El revuelo que se organizó con el tema catalán en este caso, contrasta con la prácticamente nula repercusión de las declaraciones de Tebas. Tampoco es muy de recibo que, el presidente de todos los clubes de fútbol, se declare abiertamente como aficionado del Real Madrid.

Javier Tebas nombró a Iraultza 1921 como grupo ultra peligroso. Algo incomprensible, ya que Iraultza 1921 como tal, no es ningún grupo, sino la asociación de todas, o casi todas, las peñas del conjunto albiazul. A eso se le llama bombardear Gernika para tirar el Árbol.

Las peñas alavesistas han colgado tifos enormes instando a apagar la TV los lunes por la noche o cambiar de canal. Han conseguido, conjuntamente con las aficiones que visitaron Mendizorrotza, que prácticamente todo el estadio, recordamos que Mendizorrotza es el estadio con mayor ocupación de La Liga, entrara cinco minutos tarde al grito de «¡Tebas vete ya!». Durante el último partido, pidieron que los aficionados fueran con ropa negra, y se escenificó el entierro del fútbol, pasando un féretro por las gradas del estadio, mientras los aficionados encendían la linterna de los móviles a modo de velas.

Los tiros de cámara de GOL, han intentado no mostrar que las gradas estaban vacías, los tifos reivindicativos, y cualquier acto de protesta. Incluso realizando tiros de cámara incomprensibles perdiendo de vista, a veces el balón.

En pleno siglo XXI no puede ocultarse la verdad, o por lo menos es mucho más complicado. Las redes sociales se llenaron con imágenes comparando lo que se veía en TV y la realidad de lo que había en el campo. Muchos periodistas lo comentaron en directo, incluso algunos subieron imágenes en las redes sociales.

Pues bien. Hete aquí que Tebas, y no es la primera vez, amenaza con multar, e incluso retirar la acreditación, a los periodistas que se hicieron eco de los hechos.

Que en los tiempos que corren se amenace con repercusiones por contar lo que pasa creo, no soy jurista, que es hasta anticonstitucional. Unamos a todas las aficiones y no dejemos que este intento de dictadura, termine de implantarse.