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Ayón y Campazzo meten al Madrid en la final

Llegábamos a la segunda semifinal de esta Copa del Rey 2019 con dos equipos que venían con la moral alta. El Real Madrid había ganado cómodamente a Estudiantes y el Joventut de Badalona, con una exhibición de Nico Laprovittola (37 puntos y 50 de valoración), se había deshecho de Unicaja.

Comenzó el primer cuarto con una declaración clara de intenciones por parte del Real Madrid: Laprovittola no iba a repetir su actuación. Desde la primera jugada tuvo a un defensor cara a cara, impidiéndole generar y crear su juego con libertad. Aparte de esto, los de Laso comenzaron atacando fuerte el aro, con Ayón y Randolph como referencias, y Deck aportando de nuevo tras su gran partido ante Estudiantes. Sin embargo, el rebote defensivo les costó muchos puntos en contra. Joventut por su parte quiso depender del tiro exterior, cosa que no les funcionó, y se les vio atascados al no poder contar con Laprovittola para dirigir el juego.

El primer tiempo dejaba al Madrid con una renta de 8 puntos, y al empezar el segundo comenzó el recital de triples de Real Madrid con su segunda unidad: Llull, Carroll, Taylor, Rudy… comenzaron a lanzar desde más allá del arco lo que no se lanzó en el primer cuarto. Aguantaban el chaparrón los de Durán mediante Todorovic, aunque sus ataques no se veían fluidos y les costaba jugar fácil. A medida que avanzaba el cuarto el Madrid dependía más del triple y menos del juego interior, que fue su sustento en el primer cuarto, y se vieron más desordenados, lo que aprovechó Joventut para ponerse a 10 puntos con dos triples consecutivos, e irse al descanso con un 48-38 en el marcador.

A la vuelta del descanso el partido seguía su caudal: ambos equipos combinaban su juego interior (cabe destacar el bonito duelo Ayón-Todorovic) y el tiro de tres. Gracias a esto último Joventut entró en racha, y pusieron al Madrid contra las cuerdas, colocándose a 5 puntos. Pero los de la capital no se echaron atrás, y con la dupla Deck-Ayón retomaron la ventaja. Además, el cansancio marcó a un Joventut que se vió trabado en ataque, lo que los blancos aprovecharon para subir el ritmo y coger una renta de casi 20 puntos, yéndose al último periodo con un 71-52.

En el cuarto y último tiempo, siguió el ritmo de ambos equipos con los triples (42 lanzó el Madrid; 27 el Joventut), y los de Badalona recortaron distancias. Ahí apareció Randolph para mantener al equipo, pero se sumó a la fiesta Conor Morgan, que sacó el fusil para anotar 5 triples y poner las cosas difíciles a los de Laso. Pero toda acción tiene una reacción, y Campazzo se puso el traje de faenar y anotó 7 puntos seguidos, que sumados al trabajo de Ayón terminaron por cerrar el partido y metieron al Madrid en otra final.

Por último, destacar el mérito del Divina Seguros Joventut, equipo que estuvo a punto de desaparecer, y que este año se mete en Copa del Rey, pasa a semifinales y compite contra un puntero como es el Real Madrid. Grandes cosas se avecinan en Badalona, mientras tanto, el Madrid llega una vez más a la final de Copa, donde ya espera un Barça Lassa que promete dar guerra en un nuevo clásico.

 

@jorgejuanramos2

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