Últimos billetes con destino a Segunda

Los nervios son a cada instante más latentes e intensos. La presión y las emociones fuertes se acercan a pasos agigantados, porque no es un partido más, es otra final para el Hércules y la UE Olot que se verán las caras el próximo sábado en el José Rico Pérez de Alicante.

La UE Olot está rompiendo los esquemas en este grupo III y lo que se presuponía que pasaría a principio de temporada no está sucediendo. Son 7 los puntos que le separan del cuarto clasificado, que coincide con el rival al que tendrá que enfrentarse en la próxima jornada: el Hércules.

Un equipo asentado esta temporada y que tiene ganas de revolucionar la categoría. Eso es el Olot. El equipo que menos goles encaja del grupo igualado con los alicantinos. Por lo que, todo hace indicar, que se vivirá un partido muy cerrado con pocas ocasiones de gol. Son 23 los goles que han recibido ambos conjuntos.

Del otro lado, el Hércules, que llega con dudas. Tan solo 1 punto de 6 posibles en los dos últimos encuentros. Eso hace de este partido una auténtica final en la que la ansiedad y el Olot serán los claros enemigos. A esta mala dinámica se le suma la importante baja de Chechu, que fue arrollado por una moto y sufrió un fuerte golpe en el cuádriceps.

A pesar de que los blanquiazules no atraviesan su mejor momento los precedentes son bastante positivos. No se le da bien el Rico Pérez al cuadro de La Garrotxa. De las últimas cuatro visitas de la UE Olot, el Hércules ha conseguido ganar en tres ocasiones y solo en una dejó escapar dos puntos.

En el aspecto deportivo las dudas son palpables. Pero en los despachos el Hércules ha conseguido solventar el match-point que atormentaba Alicante desde hace ya varios meses. Los alicantinos se han librado de pagar los 7 millones que debían por supuestas ayudas ilegales.