Un duro debut para Manolo Sánchez Murias

Nueva etapa en el filial rojiblanco para buscar la salvación en los nueve partidos que restan. Manolo Sánchez Murias regresa al Sporting ‘B’ y lo hará en la siempre complicada plaza de Lasesarre. Además frente a un cuadro gualdinegro que llega henchido tras la importantísima victoria del pasado domingo en Langreo y que le permitió afianzarse con más poderío en la cuarta plaza.

Por ello el partido tiene alicientes que hacen que la clasificación sea menos importante de lo que puede parecer en un duelo entre equipos separados por 19 puntos. El encargado de dirigir la contienda será el veterano colegiado palentino Román Román. Adscrito al comité castellano-leonés, a sus 31 años cumple su novena temporada dirigiendo encuentros en la categoría de bronce. Por este motivo ya sabe lo que es dirigir a ambos equipos. Tres al filial rojiblanco con una victoria, un empate y una derrota; y ocho al Barakaldo. El balance con los fabriles es de dos victorias, cinco empates y una sola derrota.

A pelear por el ascenso

Si algo ha dejado claro el partido de Langreo para el cuadro baracaldés es que ahora solo cabe un objetivo. Y ese es pelear por ascender. Aventajan en ocho puntos en sus perseguidores con veintisiete solo por disputarse. Eso supone casi un tercio del camino hecho, pero no cabe relajación y en el vestuario lo saben. Jon Ander Dopico, así lo expresaba: «personalmente me quité un peso de encima con el gol en Langreo, pero lo importante es que al equipo le sirvió para sumar tres puntos importantes. Aventajamos en ocho puntos a Sanse y Oviedo ‘B’ y nos toca seguir peleando para asegurar el play-off».

El primer paso de esos nueve es el Sporting ‘B’. No se fían del mal momento en Barakaldo. Son conocedores de que el filial rojiblanco tiene buenos jugadores, con calidad suficiente para hacerte sufrir. A ello se une que un relevo de entrenador, suele traer aparejada una reacción. Además el Barakaldo busca ser más solvente en casa. Los últimos dos encuentros sumó cuatro de los seis puntos en juego, pero las sensaciones no fueron del todo buenas. Aitor Larrazábal introducirá pocos cambios en el once y dará continuidad al grueso del equipo que venció en el Nuevo Ganzábal. Seguirá el técnico bilbaíno sin Galán y Villacañas una jornada más. Ambos serán las únicas bajas del equipo esta jornada.

Salvar los muebles de la mejor forma posible

La etapa de Isma Piñera en el banquillo del filial ha sido tan dramática a nivel de resultados que el filial se encuentra en una situación de un solo punto de ventaja sobre el play-out y tres sobre el descenso. La derrota frente a la Cultural de Durango provocó que la entidad tomase medidas con un cambio de entrenador. Ahora le toca a Manolo Sánchez Murias, quien ya dirigiera con notable éxito al filial hace siete temporadas, salvar los muebles de la temporada.

Sus primeras medidas apuntan a que pasará por recuperar el 4-3-3 o el 4-1-4-1 que Isma Piñera desechó en casi toda su etapa en el filial. Así todo apunta a que Álex Zalaya, Gragera y Pelayo Morilla regresarán a la titularidad. También lo hará, salvo novedad de última hora, Carlos Cordero. El extremeño volverá con el filial hasta final de temporada salvo cuando sea necesaria su presencia en el primer equipo. En el capítulo de bajas, Manolo no podrá contar con cuatro jugadores. Javi Benítez subirá al primer equipo esta jornada; Bogdan, convocado con Ucrania sub-21, además de Mateo y Bertín, ambos por lesión.

Un duelo de claro color negro y dorado

A lo largo de su historia, Barakaldo y Sporting ‘B’ se han enfrentado en veintitrés ocasiones en partido oficial. Dieciséis victorias gualdinegras, cinco gijonesas y dos empates es el balance general histórico. Pero en los duelos disputados en Lasesarre el dominio es aún mayor de los vizcaínos. Y es que la última victoria del filial gijonés en el césped baracaldés data de hace 35 años. Mismamente el año pasado el Sporting ‘B’ llegaba invicto como visitante a Lasesarre y ahí cosechó su primera derrota a domicilio. En el encuentro de la primera vuelta en Mareo, los entonces pupilos de José Alberto López se impusieron por 2-0 gracias a los goles de Santamaría y Cordero. Ambos se presumen como titulares también este encuentro.