El Gernika quiere ahondar la herida rojilla como visitante

Sigue el tour del fútbol vizcaíno en Urbieta este sábado. Si a las 16:30 horas arranca en Amorebieta, a las 17:00 horas en Leioa, a las 18:00 horas es el turno de Gernika. En el césped sintético de la villa foral el Gernika acabará su etapa pirenaica frente a la parte de alta de la tabla recibiendo a un Mirandés que buscará volver a ganar como visitante.

Pero los locales llegan más necesitados. El, en general, buen partido de la semana pasada supo a decepción en la expedición gernikarra desplazada a Zubieta, donde solo sumaron un punto. Un punto, eso sí, que les permitió salir del descenso directo y que buscan hacer bueno frente al Mirandés. Será en un encuentro que dirigirá el colegiado asturiano Enrique Gao Aladro. Este fisioterapeuta de profesión, cumple su segunda categoría como árbitro de Segunda ‘B’. Será la primera vez que se cruce en la trayectoria de ambos equipos. Esta campaña ha dirigido once encuentros; seis victorias locales, tres visitantes y dos empates es su balance.

Ganar para sacar la cabeza del hoyo

Desde luego al Gernika nadie le podrá decir que no compite. Los de Urtzi Arrondo lo hacen hasta el extremo. Su problema es que les cuesta mucho ganar encuentros. Así se explica que un conjunto que está en su mejor momento de la temporada y que acumula cinco encuentros consecutivos sin perder. Pero todos ellos empates, siendo el último la pasada semana en Zubieta donde el buen encuentro de los forales no les sirvió para ganar. Por eso necesitan ganar. Porque a estas alturas de la temporada y la encarnizada lucha existente por eludir el descenso es el único resultado que vale.

Frente al Mirandés, un cuadro que suma treinta puntos más en la tabla que el Gernika, el cuadro foral no podrá contar con Berasaluce. El defensa gerniqués vio en Zubieta su décima amonestación del curso y tendrá que cumplir su segundo partido de sanción. El resto de la plantilla estará a disposición de Urtzi Arrondo. El técnico de Beasain quiere que su equipo se muestre competitivo como hizo frente a otros rivales de la zona noble como Racing o Logroñés. Dos conjuntos que no pudieron pasar del empate a cero en Urbieta.

Asegurar el segundo puesto y llegar bien el play-off

El objetivo del Mirandés es radicalmente opuesto al del Gernika. Los rojillos están inmersos en una lucha por asegurar cuanto antes el segundo puesto de la tabla. Un puesto que en un play-off les daría, como mínimo, una primera ronda con el factor campo a favor. El llegar en el mejor estado posible tras un mes de Marzo muy complicado a ese play-off es el objetivo que Borja Jiménez y su cuerpo técnico se marcan.

La semana pasada lograron vencer en Anduva en Leioa, confirmando así su campo como uno de los pocos que no sabe lo que es perder. Además sirvió para recuperar sensaciones tras un mes de Marzo con mucha carga de partidos. Para la visita a Urbieta, el técnico podrá disponer de toda su plantilla que ya trabaja con normalidad. No apunta a ser en este partido, pero el final del túnel se acerca para Pito Camacho tras su grave lesión en verano. El delantero almeriense ya podrá volver en breve a los terrenos de juego. La decisión depende del técnico abulense que tendrá que realizar varios descartes en la expedición que se desplazará en el día a tierras vizcaínas.

Los forales a por su primera victoria

No se han enfrentado mucho a lo largo de su historia Gernika y Mirandés. Solo tres ocasiones entre la pasada temporada y la anterior, con un balance de dos triunfos rojillo y un empate. En el encuentro de la primera vuelta en Anduva, el Gernika estuvo cerca de puntuar. Un solitario gol de Álvaro Rey en los minutos finales dejó la victoria en tierras castellanas. Este sábado, los vizcaínos buscarán su primer triunfo.