Walter Tavares ha sido reconocido como el mejor defensor de toda la Euroliga. El pívot ha sido uno de los mejores avales del Real Madrid para cosechar la tercera posición en la fase regular y para acceder a la Final Four tras eliminar a Panathinaikos. Ahora, la competición reconoce su capacidad de rebotear, taponar e intimidar, además de su solvencia en la pintura.
Cuando el Real Madrid tuvo que recurrir al mercado el año pasado con todo el alarde de lesiones que sufrió en la rotación interior, nadie se esperaba, ni mucho menos, que Walter Tavares fuese a ser uno de los bastiones del esquema de Pablo Laso esta temporada. Sus 2.20 metros han sido todo un plus para el equipo blanco, que ha encontrado en el caboverdiano un arma de doble filo en ataque y defensa.
Walter Tavares ha sido elegido el mejor defensor de la Euroliga por sus números y por esos factores intangibles que rigen muchas veces el baloncesto. El pívot ha sido el que más tapones por partido ha colocado (1.7), el que más tapones en global ha puesto (53) y el que más tapones promedia cada 40 minutos (3.3). A esto se le suma que es el quinto máximo reboteador de toda la competición, con 6.2 rebotes por partido. Y a lo numérico se suma el hecho de que no existe ningún jugador en Europa que sea capaz de intimidar y de desviar tiros como lo hace el caboverdiano, con perdón de Jan Vesely.
Kyle Hines, ganador de este galardón el año pasado, cede el testigo a Walter Tavares, convirtiéndose en el primer jugador en la historia del Real Madrid en ganarlo y en el segundo africano en conseguirlo, por detrás de Stephane Lasme, que lo ganó en 2013 cuando militaba en el Panathinaikos. Precisamente del club griego era el jugador que más veces ha ganado este premio: la leyenda Dimitris Diamantidis, que llevó el trofeo a su vitrina hasta en seis ocasiones.