El Deportivo de la Coruña, ha logrado colarse en la gran final por el ascenso a Primera División, gracias a su goleada, previa remontada, en Riazor. Y gracias también a mostrar una cara sobria, sólida en un campo tan complicado en esta categoría como es el feudo del Málaga CF.
El conjunto herculino fue todo un muro de contención que el cuadro de la Costa del Sol no fue capaz de superar, ni siquiera con su jugador más en forma como es Javier Ontiveros. Y gran parte de la culpa de esta solidez la tiene un nombre. Alejandro Bergantiños García.
El capitán del cuadro gallego realizó todo un partidazo en la medular, cortando balones peligrosos e incluso siendo capaz de incorporarse al ataque, comandando muchos internadas del cuadro gallego. Su partido se redondeó con un gol, con la colaboración del meta marroquí del Málaga, Munir, que sella el pase de los gallegos a la final por el ascenso a la máxima categoría del fútbol español.