La temporada de Roberto Rosales en el Espanyol ha sido más que satisfactoria. El venezolano, que con su gol en la última jornada devolvió al cuadro blanquiazul a Europa doce años después, ha disputado en total 26 partidos y logró 3 goles. Solo las lesiones han impedido que tuviera más participación a las órdenes de Rubi.
Por ello el club perico quiere que el venezolano siga a sus 30 años en el RCDE Stadium según avanza MARCA. Una operación que se ha visto facilitada este pasado fin de semana tras no lograr el Málaga, club con el que Rosales tiene contrato hasta 2020, el ascenso. Aunque el Espanyol podía quedárselo igualmente aun subiendo el club costasoleño -la cesión guarda una opción de compra por tres millones-, ese no ascenso facilita las cosas.
El Espanyol pretende abaratar ese coste. Conocedores en sus oficinas de que la posición negociadora malacitana es débil ante su necesidad de liberar muchísima masa salarial y de que el venezolano entra en último año de contrato. La reestructuración económica que tendrá que hacer el Málaga es un nivel casi salvaje. De forma que serán muchos jugadores los que saldrán definitivamente de la entidad. Rosales apunta a ser uno y el Espanyol quiere seguir contando con él y el club blanquiazul buscará forzar un traspaso lo más bajo posible.