Antepenúltima cita del mundial de Fórmula E en Suiza con el mundial muy apretado. Jean-Eric Vergne, líder del mundial, también conseguía la pole, con Mitch Evans segundo. El francés tenía una gran oportunidad para dar un hachazo importante al mundial a falta de la doble cita de Nueva York.
El piloto de DS Techeetah salía bien y mantenía su posición. Pero la carrera se paraba bajo régimen de bandera roja. La primera curva era un embudo y provocaba el primer accidente múltiple de la carrera. Günther tocaba ligeramente por detrás a Wehrlein, que quedaba atascado entre el muro y el coche de su rival. Al ser de los pilotos que encabezaban la parrilla, el resto no han podido seguir, y los que lo han hecho han tenido que pasar atajando la chicane.
Los coches volvían a boxes tras el coche de seguridad para posteriormente relanzar la carrera. Los principales damnificados eran Frijns, que tenía que abandonar tras haber trompeado por culpa ajena, Günther y Wehrlein, cuyos coches quedaban dañados pero podían continuar.
Muchas dificultades para adelantar
Tras la relanzada se mantenían las posiciones. Evans, que era segundo, se acercaba mucho a Vergne, pero el angosto trazado le impedía sobrepasar a su rival. Esto lo aprovechaba el francés, que marcaba el ritmo y controlaba la carrera. Lo mismo sucedía en el resto de luchas. Pese a las escasas diferencias entre coches, era imposible adelantar.
No fue hasta que quedaba media hora cuando algunos pilotos comenzaron a activar el modo ataque, aunque tampoco era posible adelantar. El primero que conseguía ganar un puesto era Sam Bird. El piloto de Envision Virgin adelantaba por el exterior a Günther para ser quinto.
Por su parte, D’Ambrosio era penalizado con un drive through por causar una colisión y Gary Paffet perdía potencia, siendo adelantado por todos los pilotos. También se quedaba parado Wehrlein, lo que beneficiaba especialmente a Bird, que ya era cuarto. La detención del Mahindra en medio de la pista provocaba el primer full course yellow.
Vergne aguantaba los ataques de Evans
Antes de este régimen, Evans había atacado con más agresividad a Vergne, pero el líder de la carrera se defendía activando su primer modo ataque. A falta de 15 minutos, Lotterer, con el modo ataque activado, adelantaba a Abt y a Günther. Asimismo, Di Grassi ya era undécimo tras sobrepasar a Oliver Rowland.
Por su parte Vergne, que había mantenido un ritmo muy discreto, aceleraba para abrir una diferencia amplia respecto a Evans. El piloto inglés ahora era perseguido por Buemi y Bird, que trataban de rebasarle.
Final agónico tras la aparición de la lluvia
Restando seis minutos para cruzar la meta, Lotterer activaba su último modo ataque y conseguía adelantar a Sam Bird después de que el inglés se pasase de frenada. El de DS Techeetah quería más y se lanzaba a por Buemi, que corría en casa. Vergne bajaba el ritmo tras ser avisado de la existencia de lluvia ligera en la primera curva del trazado. Esto hacía que los primeros se acercasen. La lluvia se intensificaba y Evans trataba de aprovecharlo para ganar la carrera. Vergne sufría para mantener el coche en la trazada y Evans seguía insistiendo pero finalmente decidía no arriesgar y las posiciones no variaban. Por su parte, Di Grassi conseguía entrar en los puntos acabando décimo y siendo el piloto que más posiciones ganaba en la carrera.
Con esta victoria, Vergne se afianza en el liderato del mundial y DS Techeetah también consolida su primera posición en el mundial de constructores. A falta de dos carreras, el francés contará con una amplia ventaja que podrá gestionar para hacerse con el título.