Antoine Griezmann (Mâcon, Francia, 21 de marzo de 1991) ya es jugador del FC Barcelona. Tras muchos meses de rumores, informaciones cruzadas, confirmaciones, desmentidos, comunicados y discusiones, se pone fin al mayor ‘culebrón’ del verano. Se pone fin con el jugador francés incorporándose, como fue siempre su deseo, al club culé para las próximas cinco temporadas. Lo hace tras depositar en la sede de LaLiga su cláusula de rescisión de 120 millones y romper así su contrato con el Atlético de Madrid.
Un pago que finalmente se ha realizado por parte del abogado del jugador, pero no exento de polémica en la última semana. La intención del FC Barcelona de intentar negociar el pago de la cláusula en varios plazos, no fue aceptado por el Atlético, que mostró su enfado en un comunicado oficial en el que, si el jugador seguía sin romper su vínculo con el club debía incorporarse a los entrenamientos. Algo que nunca ocurrió, pues el jugador se negó en rotundo a hacerlo. Tanto el Barça como Griezmann anunciaron que esta semana se cerraría todo el ‘culebrón’. Algo que así ha sido con el anuncio oficial del club culé de su incorporación.
24 millones para las arcas de la Real Sociedad
Pero el Atlético no ingresará en sus arcas los 120 millones del abono de su cláusula. Cuando el Atlético fichó a Griezmann, Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad, incluyó la cláusula del 20% de la plusvalía en caso de traspaso a un tercero, que es la que se activa ahora. En vez de exigir el abono de su cláusula de entonces (30 millones), la Real negoció e incluyó esa cláusula. Cinco años después, eso supone un total de 24 millones extra que le vendrán muy bien al cuadro txuriurdin.