Rodrigo Moreno Machado (6 de marzo de 1991). La temporada de menos a más del ariete che provoca una autentica mascleta en seno valencianista. El internacional español ha cuajado una de sus mejores temporadas en el club de la avenida de Suecia, sí bien a principios de junio su futuro era incierto cómo el propio jugador afirmaba “no puedo garantizar si seguiré o no en el Valencia la próxima temporada” parece que las cosas han cambiado, el propio jugador ratificaba su compromiso con el cuadro de Marcelino G.T en su campus de Andorra el pasado 2 de julio. Ante la pregunta de un niño el jugador confirmaba para tranquilidad de la parroquia valencianista que no se iba y que era muy feliz en Valencia.
Una primera vuelta para olvidar
Irreconocible, sin olfato goleador, fuera de forma. Son adjetivos con los que se podría calificar la primera vuelta del jugador nacido en Rio de Janeiro. Cuatro meses, 1390 minutos tuvieron que pasar para el delantero valencianista rompiera su sequia en Eibar. Por esfuerzo no era, el ariete che lo intentaba partido tras partido pero parecía negado de cara al gol. Pero Rodrigo contaba con algo que pocos jugadores cuentan, el apoyo y respeto de la parroquia valencianista, todos a una y con el hispano brasileño lograron que el líder del ataque che resurgiera como ave fénix de sus cenizas, a partir de ese partido como todo el mundo sabe la su historia en esta centenaria temporada cambió.
Suya es mitad Copa del Rey. El hack trick de su vida…
Una noche mágica, donde solo unos pocos son capaces de brillar, así podría empezar un relato sobre gran partido vivido una fría noche de finales de enero en el viejo coliseo de la avenida de Suecia. Una de las eliminatorias más duras que se recuerdan en el fútbol moderno. El equipo de Marcelino venía de perder en Getafe días antes, en un partido cargado por los duros reproches y juego sucio del club del sur de Madrid. Se tenían ganas, pero como decía solo unos pocos pueden brillar. Este fue Rodrigo Moreno o como le apodan en Valencia Rodrigol, con la eliminatoria prácticamente imposible con un 0-2 en el goblal, el buque insignia de valencianista alzo el vuelo y remonto con un hat-trick en los minutos finales la remontada che para delirio de todos los aficionados. Sin lugar a dudas esa eliminatoria quedo grabada en cada uno de los que forman esta bonita familia.
Le faltaba la estocada final
Coincidió con el mejor Valencia de la temporada, todos y cada uno de los jugadores estaban cómo dirían en Reino Unido “on fire” pero si hay que destacar a algunos por encima del resto sin lugar a dudas sería a José Luis Gayà, Dani Parejo, Kevin Gameiro y por supuesto Rodrigo Moreno. La dupla formada por el francés y el hispano brasileño funcionaba a la perfección nutriendo de goles y asistencias al equipo. Suyos fueron los goles de la final de Copa, pero el trabajado y la dedicación que esconden detrás no tiene desperdicio. El propio Rodrigo se consagró en ese partido cómo uno de los ídolos del murciélago, Mestalla se lo agradeció ovacionándolo y pidiéndole que se quedara en las celebraciones posteriores.
Chico trabajador cómo el que más, sin alzar la voz cuando todo estaba en su contra, capitaneando al Valencia cuando hacía falta. Lo que ha conseguido este hombre es digno de admirar, cómo Parejo cambio los pitos por los aplausos y sin lugar a duda se convirtió en uno de los referentes del murciélago. Todo parece indicar que su futuro seguirá ligado al club de Mestalla, pero si marcha, el hispano brasileño se llevara algo más que un bonito recuerdo, se llevara el cariño y el respeto de su afición.