Osasuna ha llegado a un acuerdo con el Getafe CF para acordar el regreso a Pamplona por tercera vez en apenas año y medio del extremo valenciano Robert Ibáñez. La diferencia es que, esta vez llega como jugador en propiedad, al conjunto navarro. Tras haber recalado en Osasuna las dos veces anteriores procedente del Getafe en forma de cesión, la tercera por fin lo hará en propiedad para las próximas tres temporadas.
En su primera etapa en Pamplona, recaló para la segunda vuelta de la 2017/2018 a las órdenes de Diego Martínez tras haberlo fichado recientemente el Getafe procedente del Valencia. Pese a su gran segunda vuelta, el equipo no pudo meterse en el play-off de ascenso en la última jornada de liga. En su segunda etapa volvió a llegar también para la segunda vuelta, pero de la 2018/2019. De nuevo, volvió a ofrecer unas grandes prestaciones y fue una pieza clave en el esquema de Jagoba Arrasate para lograr el ascenso del conjunto pamplonica a la Liga Santander.
Con su llegada se desvanece la de Lazo
Con esta llegada, supone la tercera estancia en Osasuna de Robert Ibáñez. Llega para ocupar una posición de banda necesitada de un jugador de sus características tras la lesión de gravedad de su compañero Kike Barja, que le mantendrá alejado de los terrenos de juego hasta la segunda vuelta. Por lo tanto, se da un vuelco a la situación y bloquea la llegada del extremo también azulón José Carlos Lazo, con quien ya existía un pre-acuerdo.
Robert siempre había sido la primera opción de la dirección deportiva rojilla, pero el Getafe había bloqueado la negociación. Este lunes sin embargo se ha producido un giro total que permitirá el regreso de Robert Ibáñez, jugador que conoce bien el club y el vestuario y que tenía como deseo vestir otra vez de rojillo.