El Valladolid saca petróleo ante un Madrid con más ganas que ideas
El Valladolid logra remontar el tardío gol de Benzema sacando un punto de oro
El Real Madrid y el Real Valladolid se enfrentaban en el Santiago Bernabéu en el encuentro correspondiente a la segunda jornada de la Liga Santander. Ambos equipos llegaban en lo alto de la tabla después de haber obtenido sendas victorias en sus correspondientes partidos, frente al Celta de Vigo y el Betis, respectivamente.
El encuentro comenzó con el control total del conjunto blanco, que buscaba constantemente el balón y pretendía hacer daño a los pucelanos por las bandas, mientras que los de Sergio se dedicaban a esperar atrás un fallo de los merengues.
Los locales dominaban por completo el centro del campo liderados por Isco y Kroos, apoyados en todo momento por un generoso Benzema que se descolgaba haciendo la función de mediapunta. La primera ocasión clara llegaba tras un centro de Isco al segundo palo que no lograba rematar Gareth Bale.
Lo seguían intentando los de Zidane por las bandas, y Carvajal encontraba nuevamente Bale, que remataba de primeras con su pierna izquierda y el golpeo se iba rozando el palo de Masip. El Valladolid sufría ante la alta presión de los merengues, mientras que esperaba la oportunidad de salir al contragolpe y sorprender así a la zaga madridista.
Lo intentaba el Madrid con una jugada de estrategia, y a la salida de un córner, después de una combinación entre Isco y Benzema, remataba Kroos desde la frontal del área con su pierna izquierda y el balón de marchaba a la derecha de Masip. Por su parte, el Valladolid intentaba buscarle las cosquillas a los locales en acciones aisladas, pero tanto Guardiola como Ünal terminaban topándose con la zaga merengue.
Casi todo el peligro del conjunto merengue provenía de la banda derecha. Hhacia el ecuador de la primera mitad, Gareth Bale encaró y tras un recorte hacia dentro, lanzó un misil con la derecha que salió rozando el travesaño. Inmediatamente después, tras una falta al borde de la frontal, era en esta ocasión James Rodríguez quien estuvo cerca de abrir la lata con un golpeo que, del mismo modo, se marchó por poco.
No todo en la primera mitad fue dominio blanco, pues a la media hora de partido el Valladolid lograba sorprender a os locales con un contragolpe y Guardiola logró plantarse por primera vez ante Courtois, pero Carvajal llegó a tiempo para taponar el disparo, en una acción que dejó dolorido al ariete blanquivioleta durante varios minutos.
Poco después, tras una nueva internada por la banda, era James quien buscaba batir con un cabezazo a Masip, pero nuevamente se marcho cerca del palo del guardameta pucelano. La más clara de la primera mitad también tendría al cafetero como protagonista, y es que tras una buena acción de Benzema, el galo cedió la pelota atrás y James la colocó con la zurda en la cepa de la portería pucelana.
Los últimos minutos de la primera mitad fueron de acoso y derribo contra la portería visitante, y es que en el 37, estuvieron muy cerca de abrir la lata en primer lugar Benzema tras una acción individual, y posteriormente Bale con un cabezazo. Poco después sería Casemiro quien probaría suerte tras un córner, con un cabezazo que se marchó muy por encima del larguero.
En los últimos instantes del primer periodo, el capital vallisoletano, Moyano, quedaba tendido en el suelo tras una acción fortuita con Bale, y poco más se pudo jugar tras la reanudación, ya que el colegiado señaló el descanso.
La segunda parte arrancó sin cambios en ninguno de los dos equipos, mientras que el guión en los primeros minutos fue similar pero el Valladolid se mostró más despreocupado y motró gran desparpajo a la hora de presionar y de atacar. La primera polémica del encuentro vino de la mano de Marcelo, que recibió un manotazo al borde del área pucelana y reclamó un penalti que Gónzales Fuertes ni siquiera consultó con el VAR.
Fue nuevamente Benzema el encargado de amenazar el área rival, tras una jugada con un balón colgado desde la izquierda que se marchó muy alto. En una jugada similar fue Bale el que estuvo cerca de anotar el primero del encuentro, pero esta vez, el testarazo se marchó rozando el palo izquierdo.
Ante la dificultad para abrir la lata, Zidane decidió dar entrada a Vinicius buscando una mayor profunidad, entrando en lugar de James, que se retiró del campo ovacionado por la que tras dos años fuera, vuelve a ser su afición. Lo volvía a intentar Bale con una internada por la banda, pero el golpeo llegaba blandito a los manos de Masip.
Poco antes de la hora de juego, el capitán pucelano, Moyano, se rompió y tuvo que entrar en su lugar el canterano Waldo. Parecía que se le acababan las ideas al conjunto de Zidane, que recurría de forma sistemática a los centros por la banda de Marcelo, mientras que el Valladolid cada vez se encontraba más cómodo soportando el débil asedio madridista.
La entrada de Vinicius logró cambiar en cierto modo el signo del partido, pues el brasileño aumentó la sensación de peligro que generaba a la zaga blanquivioleta cada acometida madridista. Ante esto, Zidane dio entrada a otro delantero, Jovic, que mandó a la cruceta la primera pelota que tocó.
La sensación en el Bernabéu era que el tiempo se agotaba y el equipo no lograba crear una gran sensación de peligro, mientras que, conforme pasaban los minutos, el Pucela se iba sintiendo más y más cómodo sobre el verde.
La tuvo el Valladolid en un contragolpe que cazó de forma magistral Guardiola, pero no que no logró filtrar la pelota para Ünal en últkma instancia, mientras que en el rechace, Waldo probó suerte desde la frontal, haciendo trabajar a Courtois por primera vez en el partido.
A falta de diez minutos, los visitantes estuvieron a punto de dar la sorpresa tras una internada de Nacho por la banda izquierda, que no acertaron a rematar los arietes pucelanos. Sergio decidió dar entrada a Antoñito, que sustituyó a un extenuado Porro.
A falta de diez minutos, los de Zidane se volcaron al ataque, y un Varane fuera de su posición, puso un servicio a Benzema, con un balón que se le quedó atrás pero cruzó de forma magistral, haciendo imposible la estirada de Masip.
Justo tras la reanudación, el Valladolid avisaría de que aún no había bajado los brazos, con un remate de Guardiola en el segundo palo que no logró colocar, pero hizo temblar al estadio blanco.
Sergio, en un intento de revolucionar el partido, dio entrada a Anuar, y en la jugada inmediatamente después, Viniciu cayó en la frontal del área, sin contacto según el criterio del árbitro, lo cual hizo enfurecer tanto al público como a Zidane.
En los últimos minutos, el Madrid buscó calmar el ritmo del encuentro con posesiones largas, pero en una pérdida de Jovic, un balón largo llegó a Guardiola, y este lo introdujo en el fondo de las mallas. Tras el mazazo, Zidane retiró a Benzema para dar entrada a Lucas.
En los últimos minutos el Madrid se volcó al ataque en busca de un nuevo tanto que les diese los tres puntos, pero las continuas pérdidas de tiempo impidieron que apenas se jugasen minutos.
Con esto llegó el final del encuentro, con un Madrid que buscó el gol sin acierto, y un Valladolid que en todo momento supo como jugar sus cartas y supo reponerse al gol de Benzema cerca del desenlace.