La renovación de Andrés Guardado, encarrilada
Quedan algunos flecos, pero las dos partes esperan oficializarla al regreso del jugador de México tras el parón de selecciones en septiembre
Tras muchos meses de conversaciones, rumores, dimes y otros tantos diretes, el Betis ha llegado al punto donde quería. Probablemente también al que el propio Andrés Guardado (Guadalajara, México, 28 de septiembre 1986) quería, que era la estabilidad de un contrato mayor con el cuadro verdiblanco. Así, ambas partes han dejada encarrilada su renovación en los últimos días tal y como informa ESPN México.
La principal discrepancia para la renovación y ampliación de un contrato que expira en junio de 2020 eran las temporadas. El Betis ofrecía una campaña más, hasta 2021 y opcional, según objetivos, hasta 2022. El jugador quiere que ambas temporadas sean fijas, es decir, que no haya ningún condicionante que haga expirar el contrato antes del 30 de junio de 2022. Esas asperezas habrían quedado limadas totalmente el pasado jueves en una reunión entre las dos partes y solo quedaría cerrar otros flecos para que la renovación sea un hecho.
Dicha renovación, no obstante, no se cerraría nunca antes del parón de selecciones del primer fin de semana de septiembre. Guardado acudirá con la ‘Tri’ a disputar encuentros contra Estados Unidos y Argentina. El club verdiblanco no tiene prisa y el jugador, pero ha querido evitar que aprovechando el viaje con su selección a su país, pueda haber sorpresas a su vuelta respecto a la renovación. Por ello se ha querido dejar todo encarrilado para que una pieza básica para Rubi, deje casi asegurado su futuro como bético.