No vale la callada por respuesta
La acusación de Augusto César Lendoiro debe ser respondida con firmeza, no vale la callada por respuesta
En el día de ayer, Augusto César Lendoiro, en su declaración por el juicio del amaño entre Levante y Zaragoza de 2011 emitió una acusación sin prueba alguna contra el Sporting de Gijón. Acusó al club gijonés de proponer un amaño en un partido que enfrentó a ambos en las jornadas finales de la temporada 2010/2011. Una campaña tras la cual el Deportivo descendería a la categoría de plata, notablemente perjudicado por el supuesto amaño entre Levante y Zaragoza. Un amaño que lleva varias semanas juzgándose en Valencia.
Vaya de antemano que, habiéndose producido supuestamente en la etapa en la que se produjo, me puedo creer cualquier cosa negativa en la que pueda estar inmersa el club rojiblanco. Pero una acusación tan grave, sin presentar prueba alguna, más allá de una supuesta conversación a la que alude el ex-presidente del club herculino, no debe quedar así, dañando la reputación histórica de una entidad con 114 años de historia.
Hoy, a través de las páginas de La Nueva España, el que fuese presidente por entonces, Manuel Vega Arango respondió. Pero yo sigo esperando a la respuesta del club. Ya dije antes que, siendo en la época en la que fue, con una deleznable persona como Alfredo García Amado al frente de las operaciones, me creo todo lo malo que puedan contar del club al que sigo desde hace más de 25 años. Pero una acusación tan grave sin mostrar prueba alguna no puede quedar sin respuesta. El Sporting DEBE contestar como ha hecho el RCD Espanyol.
Cada minuto que pasa sin contestarse dicha acusación gana fuerza y aumentan las especulaciones sobre su posible veracidad o no. El Sporting debe responder y debe hacerlo con contundencia. De hecho me atrevo a aventurar que debería hacerlo amenazando con tomar medidas legales ante tal difamación. La callada, cuando se está jugando con la reputación de la entidad, no sirve jamás como respuesta.