El problema o virtud de cerrar los partidos

Hay equipos que tienen una virtud innata para saber cerrar los partidos. Equipos que una vez logran adelantarse en el marcador dan plena seguridad en que, en una mayoría, sino todas, las ocasiones de que no van a sufrir una remontada que les deje con la dulce miel de la victoria en la boca. Por el lado contrario hay otros que no son capaces a cerrar los partidos y que hacen condenar a sus aficionados semana sí y semana también a padecer sufrimientos extremos.

Es algo que se puede apreciar muy bien en una clasificación ficticia teniendo solo en cuenta los primeros tiempos de los partidos. Algo que @vintage_stats hizo para LaLiga SmartBank y que dejaría una clasificación muy diferente a la actual. Una clasificación en la que los primeros clasificados no serían Cádiz y Almería; sino que serían Rayo Vallecano y Sporting.

Tanto los madrileños como los asturianos sumarían en esa hipotética clasificación 21 puntos, que les permitiría encabezar al tabla. Lo harían, eso sí, seguido por el Cádiz y la Ponferradina, a un solo punto en la tercera y cuarta plaza (20). La zona de play-off la completaría el Elche, con 19 puntos en quinto puesto y el Alcorcón, sexto, con 18 puntos.

Una clasificación que deja sobre todo un caso de estudio; el del Sporting. Los gijoneses han dejado escapar hasta siete puntos en las segundas mitades que les privan de estar en la zona de ascenso directo y les tiene peleando por la zona baja de la tabla. Algo que también le sucede al Rayo, si bien en mucha menor medida, pues en su caso solo serían dos puntos -los que cedieron en Vallecas frente al Alcorcón- y por eso marchan en zona de play-off.

Pero como toda estadística, tiene su contrapunto. Y es que hay equipos que suman muchos puntos tras el paso por vestuarios. Estos son los casos del Fuenlabrada y el Albacete. Los madrileños tendrían 13 puntos, siete menos de los que tienen ahora. Y el Albacete, que suma 19 puntos,tendría solamente 14 puntos. Dos conjuntos que han sabido hacer largos los partidos, aprovechando sus ocasiones más que ninguno.