Este Mirandés ya funciona
Tras lograr dos victorias consecutivas desplegando un fútbol vertical y efectivo, Andoni Iraola parece haber dado con la tecla
El regreso del CD Mirandés a LaLiga SmartBank tras dos años alejado de ella no fue precisamente muy dulce. Comenzó con un meritorio empate en Vallecas que colmó de ilusión a la afición rojilla. Sobre todo porque en aquel encuentro, el Mirandés mostró armas que, semanas más tarde, se están viendo claves. Presión alta, ser protagonista e intentar ser muy verticales en campo contrario le hicieron puntuar en Vallecas y quedarse muy cerca de ganar.
Esa idea persistió con las jornadas pero al equipo de Andoni Iraola le atacó entonces uno de los ‘virus’ clásicos en el fútbol como es el de la ‘manta corta’. El Mirandés estiraba mucho el campo y eso le costaba ser endeble en defensa. Así son uno de los equipos menos eficaces en labores defensivas, ya que, hasta la fecha es al equipo que, con menos tiros, más goles le hacen.
La solución pasaba por encontrar el equilibrio. Mutar el equipo hacia un equipo ordenado y que intentara salir a la contra no casaba con el ideario de Andoni Iraola, ni probablemente casase mucho con muchos de los elementos de la plantilla, mucho más diseñada para tener el control del juego que para el clásico ‘robar y correr’. Al técnico vasco le costó. Incluso por el camino encajó duras derrotas como en Santander, Ponferrada y vio como se le escapaban triunfos que ya acariciaban, como frente a Alcorcón o Deportivo.
Un paso al frente
Pero en los dos últimos partidos el equipo ha dado un paso al frente. Sin variar su forma de jugar, se ha mostrado más efectivo en las áreas. En defensa sigue dejando alguna duda, pero la mejoría es notoria. En ataque lo mismo. Si bien nunca fue el mayor problema, también los delanteros han dado un paso al frente. Especialmente destaca el de Marcos André, que no solo suma tres goles que valen muchos puntos, sino también siendo el primer defensor. Su incansable trabajo en la presión le hace ahora mismo un hombre indispensable en el campo.
Los flancos con Merquelanz y Álvaro Rey no tienen discusión. Lo mismo que Antonio Sánchez en la medular y la eclosión definitiva de Álvaro Peña como ’10’. Éste ha adelantado de forma clara a Iñigo Vicente, uno de los fichajes quizá más flamantes, a estar a caballo entre el banquillo y la grada. En definitiva, Andoni Iraola parece haber encontrado su once tipo y que funciona. Algo que ha servido para que el Mirandés saque la cabeza y su fiel afición vea un horizonte mucho más despejado que hace escasas jornadas.