El pasado domingo en El Sadar, el Valencia pudo comprobar en sus propias carnes el fortín inexpugnable en el que se ha convertido el Estadio del Sadar en el último año y medio. Osasuna logró igualar su récord histórico de encuentros consecutivos sin perder como local (30). La serie de 30 encuentros ligueros sin derrota en casa de Osasuna no sólo empata el recorrido similar que se completó en las campañas 56/57, 57/58 y 58/59, con el equipo rojillo en Primera en aquellos años gloriosos en el campo de San Juan, sino que sitúa al equipo que dirige Arrasate ante el momento histórico de batir el récord en la siguiente cita. El partido del domingo 3 de noviembre frente al Alavés (16:00 h) tiene algo más de interés que el que concede la búsqueda de los 3 puntos en juego.
Y es que Osasuna acumula la friolera cifra de 30 encuentros ligueros consecutivos. Más de año y medio, 19 meses, sin conocer la derrota en el templo del fútbol navarro. En esos 30 encuentros, el cuadro rojillo además ha logrado 23 victorias y 7 empates, en donde llegó a tener una racha de 17 victorias consecutivas que se truncó tras el empate sin goles en El Sadar en la jornada 2 entre Osasuna y Eibar. En total, en esos 30 partidos Osasuna ha logrado 76 de 90 puntos posibles lo que convierten al Sadar en una fortaleza inexpugnable.
Para ver la última derrota liguera de Osasuna en el coliseo rojillo, hay que remontarse hasta el pasado 1 de Abril de 2018. Aquella ocasión, en donde el conjunto navarro, dirigido entonces por el actual técnico del Granada Diego Martínez, caía por 0-1 frente al Tenerife ante su parroquia como consecuencia de un solitario tanto de Brian Acosta. Fue tras un disparo desde fuera del área que daba la victoria a los isleños. Como decimos, desde entonces, Osasuna se ha mantenido imbatido en los próximos 30 encuentros ligueros. Era el final de la temporada 2017/2018 y sus siguientes encuentros como local Osasuna los terminó con 2 empates ante Córdoba y Lugo y con 2 empates ante Oviedo y Lorca.
En la siguiente temporada, la del ascenso y con Jagoba Arrasate a los mandos, comenzó con 2 victorias y 2 empates en los primeros 4 partidos en El Sadar. Empató ante Elche en el primer partido en su feudo y Numancia en el cuarto. Venció al Almería y Córdoba en el 2° y 3º partido. A partir de ahí y hasta el final de temporada, llegaría la espectacular racha de 17 victorias consecutivas hasta finalizar la temporada.
Esas 17 victorias consecutivas llegaron ante Córdoba, Málaga, Tenerife, Lugo, Alcorcón, Cádiz, Mallorca, Granada, Zaragoza, Nástic de Tarragona, Rayo Majadahonda, Extremadura, Deportivo, Albacete, Reus, Las Palmas y por último Real Oviedo.
En toda la temporada, Osasuna venció 19 encuentros, logró 2 empates y no cosechó ni una sola derrota. Obtuvo en total de 59 sobre los 63 puntos posibles, cifra récord de puntos obtenidos como local en toda la historia de las 3 primeras categorías del fútbol español. Un hito logrado en el Estadio del Sadar difícil de superar.
Por último, y ya tras el ascenso y en Primera División, en sus 5 primeros encuentros en su feudo Osasuna sigue invicto 30 partidos después de 3 empates ante un siempre correoso y competitivo Éibar, ante el todopoderoso FC Barcelona, máximo aspirante siempre a todo, y ante uno de los equipos que mejor se ha reforzado y más ha invertido, el Real Betis Balompié. Tras estos 3 empates, en los que quizás los rojillos merecieron la victoria en esos 3 partidos, los navarros han logrado 2 victorias consecutivas en su feudo ante 2 equipos muy potentes como el Villarreal y el Valencia. Además, ante el Barcelona, el guardameta rojillo y canterano del F.C. Barcelona Rubén Martínez dejó una marca de 700 minutos imbatido en la portería rojilla, uno de los récords de imbatilidad en la historia de la entidad navarra.
Un fortín, el Estadio del Sadar, en el que los de Arrasate quieren mantener por muchos partidos más su imbatibilidad. Solo así podrán tener una temporada tranquila y lograr lo antes posible la permanencia en la máxima categoría del balompié español.